El Mallorca golea en la despedida de Galarreta y Kang-in

Muriqi, Copete y Ángel pusieron los goles en el último partido del árbitro Mateu Lahoz. El colegiado termina su carrera en el césped sin mostrar una tarjeta amarilla. El Rayo llegó al descanso a un gol de Europa, pero en la segunda parte se despertó del sueño.

Para la cita en Palma, Iraola puso las sorpresas en la alineación y el equipo de Aguirre en la vestimenta, una camiseta con detalles naranjas, elegida para la ocasión.

Isi fue el primero en recordar que La Franja se jugaba algo. No se había llegado al primer minuto y un disparo lejano probó al joven Leo Román, que detuvo la pelota sin problemas.

El partido seguía el guion previsto. El Rayo se encomendaba a Isi para buscar el área rival y el Mallorca a los detalles de Kang-in. El surcoreano intentó un remate de chilena pero no conectó con la pelota. Sin embargo, Iraola y Aguirre, que se saludaron muy efusivamente al inicio del encuentro, tenían el plan para evitar que los magos del partido les sorprendieran. Copete e Isi se las tuvieron durante toda la primera parte. El central malllorquinista no dejaba respirar al murciano. Mientras la presión sobre Kang-in hacía que no entrara en el juego con el peligro que acostumbra. Antes del descanso, una ocasión de Dani Rodríguez para los locales y una Mumim, que desbarataron Copete y Jaume Costa. Así se llegó al descanso. El Rayo seguía a un gol de Europa, gracias a los resultados del resto de partidos.

Tras el descanso, el Rayo tuvo un tímido arrebato en busca de un gol, pero le duró cinco minutos. Una jugada iniciada por Valjent que Dani convirtió en una asistencia a Muriqi. El kosovar no perdonaba y Europa se alejaba de Vallecas. El equipo de Iraola no encajó bien el golpe y en el minuto 70 recibió un segundo golpe a través de un cabezazo de Copete, después de un pase milimétrico de Kang-in, en un córner. Ángel, que había salido desde el banquillo, se encargó de rematar a La Franja tras ganar la espalda a la defensa. La grada de Son Moix era una fiesta, el broche final perfecto para una gran temporada.

Iraola decidió poner más artillería en el campo en busca de un resultado mejor. El ataque rayista ponía mucho corazón, pero sin acierto y el Mallorca se llevó la victoria en la despedida de un Mateu Lahoz. El colegiado, visiblemente emocionado, se despidió del arbitraje. Los jugadores de Mallorca y Rayo le hicieron un pasillo al final del partido.

La grada de Son Moix vivió una fiesta de despedida y dedicó sendas ovaciones a Galarreta y Kang-in. Al surcoreano le cantaron: “Kang-in, quédate”.