El ‘infierno’ del RCDE Stadium

El paraíso del RCDE Stadium es más bien un infierno esta temporada, con escasos momentos mágicos, quizás la prórroga ganada al Celta en la Copa y algunos tramos concretos de partidos, de remontadas inacabadas como la del sábado ante el Girona (2-2). Los aficionados solamente han podido celebrar una victoria y tres empates, mientras que han visto como en cuatro ocasiones los rivales se han llevado los tres puntos. El RCDE Stadium es uno de los estadios más asequibles de Primera, y eso que de la zona alta aún quedan por visitarlo Atlético, Real Sociedad, Athletic, Barcelona o Betis, el siguiente rival.

El Espanyol es el segundo peor local del campeonato. Apenas ha conseguido sumar el 25% de los puntos, igual que el Sevilla, y solamente el Elche, colista de la categoría y prácticamente deshauciado, ha logrado un botín menor (dos puntos). El Espanyol ha ganado un encuentro, ante el Valladolid (1-0), mientras que ha conseguido tres empates calcados, en los que durante un tramo tenía la victoria ante el bolsillo. De perder a ganar para finalmente empatar, como ante el Girona. Lo mismo ocurrió ante Valencia y Elche (2-2).

Las derrotas se concentran ante el Real Madrid (1-3), Villarreal (0-1), Rayo Vallecano (0-2) y Sevilla (2-3), todos ellos encuentros en los que los blanquiazules tuvieron oportunidades y momentos para sumar mejores resultados. Diego Martínez, después del empate ante el Girona, se expresaba así sobre el pobre balance en casa: “Hemos tenido situaciones muy anómalas cuando hemos jugado como locales. Entendemos la frustración de la afición, pero aseguro que el equipo da todo lo que tiene”. El ambiente en el estadio acompaña al equipo hasta el final del encuentro, lejos de reflejar el descontento con la mala racha perica.

En el juego de equilibrios del fútbol, el Espanyol tiene un grave problema a nivel defensivo, no corregido teniendo en cuenta que el Girona siguió hurgando en la herida perica con dos goles que mantienen la media en el RCDE Stadium. Con 15 tantos en ocho encuentros, el equipo blanquiazul es el conjunto más goleado como local. El diagnóstico del Espanyol en casa es claro. Al margen de los problemas defensivos, el equipo no ha logrado ponerse por delante ni ir ganando al descanso en ninguno de ellos salvo el día del Valladolid, único partido en el que también logró mantener la ventaja en el marcador.

Los números están a años luz de los del curso pasado. Después de ocho jornadas en casa, el equipo de Vicente Moreno ha sumado 17 puntos (+11) y era el quinto mejor local del campeonato con un balance de solo cuatro goles en contra (-11). La solvencia defensiva era mayor con prácticamente los mismos jugadores, con una línea defensiva formada por Óscar Gil, Sergi Gómez, Leandro Cabrera y Adrià Pedrosa, el único cambio de este curso, con Brian Oliván en el campo.