El caso Horta vuelve a dilatarse y se teme la solución salomónica del TAS

En teoría, este martes 5 de noviembre se debería haber cerrado de una santa vez el famoso ‘caso Horta’, un farragoso asunto que ha superado en tiempo y densidad a los famosos culebrones de Guillermo Sautier Casaseca ‘Ama Rosa’ o ‘Simplemente María’. Este último duró 501 capítulos. Lo del futbolista portugués va para diez años desde que fichó en el verano de 2014 y el entonces director deportivo, Mario Husillos, dijo sobre él lo siguiente: “Levantará al público de sus asientos”.

Pero no. Málaga y Sporting de Braga han pedido un nuevo aplazamiento porque siguen sin ponerse de acuerdo por lo que el TAS (Tribunal de Arbitraje Deportivo en sus siglas en francés de Tribunal Arbitraje du Sports) con sede en Laussane (Suiza) parece que tendrá la última palabra para dar por zanjado este desesperante asunto. Aguardará a que los litigantes se pongan de acuerdo. Si esto no sucede, entonces tomará una decisión salomónica de esas que son para temer: “Ni para ti ni para mí”.

La situación está de la siguiente manera. Antonio Salvador, presidente del Braga, aseguró hace poco que había alcanzado un acuerdo con el Málaga en virtud del cual abonaría siete millones de euros. Este extremo no fue reconocido por el club de La Rosaleda, que pretende incluir una clausula en virtud de la cual tenga derecho al 50% de un futuro traspaso, algo a lo que niega el club portugués.

En este último punto hay como trasfondo una posible oferta por el extremo procedente del multimillonario fútbol de Arabia Saudí, lo que explicaría el empecinamiento de ambas partes en discutir a propósito del citado porcentaje. Puede ser un último tren para sacar más rédito por este jugador, de 30 años y que Transfermarkt tasa en 15.000.000 euros. Este es un asunto que tiene bastante absorbido al administrador judicial, José María Muñoz.

En 2014 el Málaga fichó a Ricardo Horta tras pagar 800.000 euros al Vitoria de Setúbal por el 50/ de su pase. En La Rosaleda no cuajó y se fue un año cedido al Braga. A renglón seguido se acordó entre ambos clubes un trueque del citado jugador y Juankar a cambio de la citada mitad de su propiedad. También se acordó la obligatoriedad de que cualquiera de las partes atendiera ofertas de terceros equipos que superasen los cinco millones de euros.

Contra todo pronóstico Horta explotó y varios equipos llamaron a su puerta y en especial el Benfica que presentó hasta tres ofertas formales, una de cinco millones, otra de 12 y la tercera de 17′5. El Málaga denunció el caso ante la FIFA y su Cámara de Resolución de Disputas le dio la razón y le obligaba a pagar 13 millones de euros. Una lluvia de dinero, según Kike Pérez ‘a tocateja’.

Pero el pasado 25 de septiembre el TAS echó sobre las cabezas de los dirigentes malaguistas un jarro de agua helada. Instó a ambos clubes a ponerse de acuerdo y el mensaje para el Málaga era más o menos éste: “Es mejor un mal acuerdo que un buen pleito” o peor aún: “O todo o nada”.

Así que el Málaga va a tener que tragar con lo que el Braga quiere y con la dilación en el tiempo que más le convenga y que, por supuesto, no será ‘a tocateja’. De lo citados siete millones de euros (esperamos sea esa cantidad…) el Málaga tiene el 45% unos 3,1millones de euros; 40% para Jorge Mendes y 5% para Juan Mata. El culebrón continúa.

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