El Ayuntamiento de Gijón conocía desde principios de enero las exigencias FIFA

El Sporting no ha sido capaz de poner sobre la mesa todavía un plan de financiación para el proyecto mundialista de El Molinón, pero la acción política ha puesto en jaque --casi mate-- la candidatura de Gijón para ser sede de la Copa del Mundo 2030 por el manejo de los tiempos según sus intereses. Esto se deduce del movimiento del Ayuntamiento de Gijón en las dos últimas semanas, apoyándose en las presuntamente inasumibles condiciones de la FIFA que se niegan a firmar y que conocían desde principios de año.

El documento con las condiciones que la FIFA impone para ser sede de un Mundial llegaron al ayuntamiento a principios de enero. Sin embargo, no fue hasta el pasado 12 de febrero cuando el gobierno municipal decidió hacer llegar a la opinión pública que supuestamente no puede asumirlo porque el gasto que supondría para la ciudad sería hipotecar las arcas municipales. Gijón es la única ciudad que no firma el documento del máximo organismo del fútbol internacional entre las aspirantes a ser sedes del Mundial que organizarán conjuntamente España, Marruecos y Portugal en 2030.

Más aún, el Ayuntamiento se ha basado en un informe jurídico de los letrados municipales para advertir el carácter vinculante de la firma de ese documento y justificar así su decisión. Es curioso que el pliego de condiciones, al que ha tenido acceso este periódico, ya apunta ese carácter vinculante en los primeros apartados del escrito; es decir, se ha apoyado en el paso del tiempo para analizar algo que se conocía desde la primera lectura allá por el mes de enero.

En concreto, el punto 2 del apartado 1 (Introducción), que se refiere a las ‘Consecuencias’, dice literalmente lo siguiente: “Es importante recalcar que todos y cada uno de los requisitos que se incluyen en el presente documento se consideran requisitos de organización fundamentales. En el caso de que una candidatura no pueda demostrar el cumplimiento de alguno de estos requisitos, la FIFA estará facultada y se reserva el derecho a determinar que dicha candidatura ha incurrido en un incumplimiento material de los requisitos mínimos para albergar la competición y que no es apta para ser presentada y evaluada por el Consejo de la FIFA / Congreso de la FIFA. Estos requisitos forman asimismo una parte integral del marco legal para albergar la competición y son obligaciones plenamente vinculantes, y el incumplimiento sustancial de las mismas podría dar lugar al derecho de rescisión de los derechos de organización”.

De cualquier modo, el Ayuntamiento de Gijón, a través de sus representantes --los tenientes de alcaldía Jesús Martínez Salvador y Ángel Pumariega--, volvió a conocer en la última reunión que esas exigencias son de obligado cumplimiento solo en el caso de que El Molinón sea elegido entre las 11 sedes que ahora mismo se plantean para España. Después, todavía quedará más pasos porque la FIFA deberá aprobar a través de su comisión evaluadora que se cumplen todos los requisitos.

Plan de financiación

En consecuencia, el Ayuntamiento de Gijón se baja del barco con esos argumentos antes de que haya zarpado. Es cierto que todo ha venido girando en torno a la ausencia de un plan de financiación al que tampoco ni el gobierno municipal ni el Principado han aportado cifra alguna sobre la cantidad que pueden asumir.

De cualquier modo, el movimiento de los políticos en las últimas horas apunta a la posibilidad de reconducir el asunto a pesar de que el plazo concedido para firmar el documento de la FIFA expira hoy. Según algunas fuentes, la Federación Española de Fútbol podría aceptar el retraso de unos días y de ahí que la oposición municipal haya promovido una reunión para la próxima semana con el fin de intentar desbloquear el asunto. El PSOE ha promovido este paso que tiene pendiente fijar el día y la hora.

En este sentido, Ángela Pumariega, como cabeza visible del Partido Popular en el gobierno municipal, ha declarado en las últimas horas que “Gijón sí debe hacer la apuesta y buscar todas las alternativas posibles para que podamos estar en la lucha”. La campeona olímpica en Londres-2012 participó en la última reunión de todas las partes en El Molinón y recuerda que “no apoyamos el proyecto del Mundial si no es viable financieramente”, pero su partido es partidario ahora mismo de que se firme el documento, algo imprescindible para seguir en la carrera mundialista.