El ascenso directo, cosa de cuatro

La liga de Segunda está que arde tanto por arriba como por abajo. Tras el pinchazo del Elche la pasada jornada, cuatro equipos pelean por conseguir el ascenso directo que, ahora mismo, sería para Leganés y Real Valladolid empatados a puntos, 67, cuando faltan todavía cuatro jornadas. Son los dos equipos que, ahora mismo, dependen de sí mismos para subir. Si ganan los cuatro partidos están en Primera. A la espera de un error de ambos se encuentra el Eibar, a tres puntos, y con el enfrentamiento particular ganado con los dos equipos por diferencia de goles en los partidos con ambos. Tampoco está descartado, ni mucho menos el Espanyol pese a que la distancia es de seis puntos. Una victoria en Zorrilla le coloca en disposición de podar optar, de nuevo, a la promoción directa.

Y es que en los duelos del fin de semana se pueden ir aclarando cuestiones o se pueden enredar todavía más. Sin duda, el partido entre el Real Valladolid y el Espanyol, 18:30 el sábado, es el duelo de la jornada y casi de la liga. Una victoria pucelana podría ser definitiva para los pucelanos y dejaría condenados a los pericos a jugar el playoff, a falta de tres jornadas, mientras que un empate le valdría más a los locales también ya que mantendrían la ventaja con los blanquiazules y en caso de que el Eibar gane al Levante mantendría a los de Pezzolano por delante. Sin embargo, en caso de victoria del Espanyol, los de Manolo González se colocarían a tres de los pucelanos, a la espera de lo que hiciera el Leganés, con un calendario interesante: partido en casa ante el Oviedo y duelos ante el Amorebieta, que puede estar descendido ese día, y ante el Cartagena, que lo más posible es que no tenga que jugarse nada en la última jornada.

Los blanquivioletas saben que pase lo que pase en Zorrilla seguirán teniendo opciones altas de ascender, pero una derrota complicaría el panorama. Después de jugar ante los blanquiazules deberán visitar al Alcorcón, en pelea por no bajar, recibirán al Villarreal B, también en la pelea por abajo, y acabarán en Tenerife, donde los chicharreros ya no se jugarían nada más allá que el honor. Una victoria ante el Espanyol le allanaría el camino, un empate dejaría las cosas casi igual, pero una derrota podría complicar el ascenso directo porque si el Eibar gana en el Ciutat adelantaría a los vallisoletanos.

El Leganés, por su parte, tiene un final de calendario más complicado. Jugará el domingo en Albacete, que acumula una racha de cuatro victorias. Si pierde y gana el Eibar también sería adelantado por los armeros por diferencia de goles en sus enfrentamientos directos ya que ganaron 0-1 en Ipurua y perdieron 0-2 en Butarque. A partir de ahí, los pepineros se la jugarían en las últimas tres jornadas con tres equipos que pelean por alcanzar la promoción: Sporting en casa, Racing de Ferrol a domicilio y Elche, de nuevo, en el estadio madrileño. Sin duda, un calendario más difícil, a priori, que el blanquivioleta.

Por último, el Eibar necesita la victoria sí o sí en el Ciutat de Valencia este sábado para no alejarse de los dos primeros puestos. Si los armeros no ganan y Real Valladolid o Leganés si lo hacen la diferencia podría irse a cinco o seis puntos dependiendo del resultado ante el Levante. Los de Etxeberria se la juegan y tienen menos oportunidades para fallar, pero saben que un fallo de pucelanos y/o pepineros sumado a una victoria propia le coloca en ascenso directo. Como le pasa al Leganés, el calendario final del Eibar está trufado de equipos que pelean por meterse en promoción: además de enfrentarse al Levante, reciben al Cartagena, visitan al Sporting y acaban ante el Oviedo en casa.

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