El Alavés se acuesta líder

El Alavés se acuesta como líder de Segunda después de jugar una minutada con diez hombres por expulsión de Benavídez. Futbolistas como Tenaglia, Abqar, Maras o Miguel se merecieron una estatua. Pero el gol de Jason es como para quitarse el sombrero y, aunque tiene menos ascendencia sobre el juego albiazul, hizo un chicharro de primera categoría. 30 puntos y a seguir soñando. Ahora lo que falta es observar lo que hacen rivales como el Burgos o Las Palmas en el fin de semana.

El conjunto vasco afrontó el partido con la duda resuelta de Maras. Era una incógnita hasta el último momento por un fuerte golpe que le ha lastrado en los días precedentes pero, al final, entró en la lista y en el once inicial. Se ve que García Plaza no ve a Laguardia todavía en condiciones de jugar los noventa minutos. Regresaron al once Tenaglia, Duarte, Toni Moya, Luis Rioja, Guridi y Jason. Cuestión de rotaciones ante la acumulación de compromisos.

En el Real Zaragoza, con un Juan Carlos Carcedo con el agua al cuello, entraron Gámez, Jair y Zapater en detrimento de Larrazabal, Petrovic y Molina. El técnico riojano criado en Los Corazonistas de Vitoria y, futbolísticamente hablando, en el Aurrera, siguió apostando por la defensa de cinco. No hubo altercados entre las aficiones. Tampoco el martes en Santander a pesar de los malos augurios en ambos casos.

El Glorioso comenzó con bastante dominio de balón ante un equipo aragonés muy bien ordenado que buscaba las cabalgadas de Giuliano. Crearon peligro Rioja, Jason y Benavídez además de un De la Fuente que presionaba muy bien la salida del balón del rival. Importunó incluso al portero que cometió alguna pérdida peligrosa. Pero eran llegadas que no terminaban con remates nítidos. Los aragoneses se replegaban bien y demostraban un plan inicial que no era otro que dejar la iniciativa a los locales.

En el 36, una entrada dura de Benavídez fue sancionada con amarilla pero el VAR advirtió al colegiado y se convirtió en roja directa. Guridi bajó al pivote para ayudar a Moya por lo que, ya en el 40, Mollejo gozó de una buena ocasión aunque remató demasiado flojo. En el 42 se anuló un gol de Jon Guridi por fuera de juego previo de Luis Rioja. Entre unas cosas y otras, el colegiado se fue a los vestuarios con sonido de viento cuando corría el minuto 50. Viendo las jugadas clave repetidas por la televisión, no se equivocó en absoluto.

Al comenzar la segunda mitad sí dio la sensación de que el árbitro perdía un poco los papeles pitando faltitas o parando demasiado el juego, pero ninguna de ellas tenía trascendencia real sobre el resultado. Quien sí lo tuvo fue Jason Remeseiro con la ejecución magistral de una falta lejana que se fue a la escuadra. 1-0 y con diez efectivos. La grada de Mendizorroza explotó de júbilo. Juan Carlos Carcedo hizo un triple cambio metiendo a Eugeni, Larrazabal y Makhtar pero luego efectuaría más sustituciones.

Ni por esas. La más clara la tuvo, de nuevo, Jason con un cabezazo que se fue alto. También pudo marcar Lluis López en el 74 pero quedó claro no era su noche. García Plaza terminó con tres centrales y defensa de cinco. El golpe de efecto final fue meter a Laguardia en el descuento, un zaragozano de nacimiento y vitoriano de adopción. En el 95, de nuevo, Sivera hizo el paradón de rigor que ya le caracteriza en los minutos finales de los partidos. Pape le regaló un balón enviándolo al centro de la portería. Pitido final y fiesta por todo lo alto. Por lo más alto de hecho, el primer puesto en esta competición.