Qué fue de Cheryshev, el canterano ruso del Real Madrid que generó una alineación indebida en la Copa

Cualquier estreno del Real Madrid en la Copa del Rey remite a aquel encuentro entre los blancos y el Cádiz en el por entonces aún llamado estadio Ramón de Carranza, en la ida de dieciseisavos de final de la Copa 2015-16. El Madrid terminó eliminado por un rival de Segunda B, algo que tampoco ha sido tan infrecuente: lo han logrado en los últimos años Real Unión, Alcorcón, Alcoyano... Pero en esa ocasión, fue una eliminación en los despachos que quedó marcada en los libros de historia del torneo.

Aquel Madrid, entrenado por Rafa Benítez, se presentó en Cádiz con un equipo lleno de suplentes que, aun así, ganaron con solvencia al Cádiz por 1-3, a expensas del duelo de vuelta en el Bernabéu. Pero durante la primera parte empezó a correr una noticia por los medios de comunicación y llegó hasta el palco del Carranza, donde los representantes del Real Madrid la leían en lugar de atender al partido: el Madrid había alineado indebidamente a Denis Cheryshev y, con toda probabilidad iba a ser eliminado por ese fallo. El ruso, canterano blanco, había pasado el curso anterior en el Villarreal y ahí se ganó una sanción de un partido por acumulación de amarillas, que debía cumplir al año siguiente. El Madrid se declaró no informado, ni por la Federación, ni por el Villarreal, ni por el jugador, pero la realidad es que el Cádiz reclamó y pasó de ronda. El Madrid quedaba eliminado.

Aquello marcó a Cheryshev. El ruso había sido parte de la brillante promoción del Castilla que llevó al filial hasta Segunda en la temporada 2011-12; en ese equipo jugó con Morata, Joselu, Carvajal, Álex, Mosquera, Nacho, Juanfran, Jesé... A eso le siquieron dos cesiones, una en Sevilla infructuosa (aunque ganó la Europa League) y otra en Villarreal, mucho más aprovechada: disputó 40 partidos, marcó siete goles y se ganó el billete de vuelta para ser fondo de armario en el Madrid 2015-16 de Benítez. Pero el periplo fue breve, motivado en buena medida por lo sucedido en Cádiz: 118 minutos y una sola titularidad, ese día en el Carranza. Para colmo, metió un gol... y fue en esa victoria por 1-3 que quedó en nada.

V de Villarreal, Valencia... y Venezia

Pasó la segunda mitad de ese curso en el Valencia y, en el verano de 2016, fue traspasado al Villarreal. En el club castellonés, sumando sus dos etapas, acumuló 89 partidos, 11 goles y 14 asistencias. Su rendimiento llamó la atención del Valencia, que pagó seis millones de euros para hacerse con sus servicios dándole un contrato de cuatro temporadas. También entre las dos etapas, acumuló 122 partidos, 11 goles y 12 asistencias. Y en 2022, quedó libre y decidió vivir su primera experiencia fuera de España.

Y se marchó a Italia, al Venezia de la Serie B italiana. Allí está atravesando su segunda temporada, tras una primera en la que tuvo cierta importancia para el técnico, con 22 partidos y cuatro goles marcados. No pudo hacer más debido a las lesiones. Este curso, a sus 33 años recién cumplidos, apenas acumula 161 minutos y las oportunidades le llegan con cuentagotas. Y a esto cabe sumar su aportación con la selección de Rusia, donde ha jugado 33 partidos y marcado 12 goles. Dejó de ser convocado en septiembre de 2021, pero hasta entonces disputó el Mundial de Rusia 2018, donde fue figura (cuatro goles) y también la Eurocopa de 2020 celebrada en el verano de 2021.

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