El Eintracht llega entre dudas
El rival del Real Madrid en la Supercopa llegará entre muchas dudas tras ser apalizado por el Bayern y con Kostic, una de sus estrellas, a punto de marcharse a la Juventus.
El Eintracht de Frankfurt llegará a Helsinki rodeado de dudas. El rival del Real Madrid por la Supercopa de Europa el próximo miércoles 10 a partir de las 21:00 horas (Movistar Liga de Campeones) arrancó el curso oficial hace unos días con un triunfo solvente ante el Magdeburgo en la primera ronda de Copa, por 0-4; una goleada convincente, pero engañosa, ante un rival de segunda. El viernes, en el estreno en Bundesliga, le tocaba refrendar las sensaciones nada menos que ante el Bayern, en la primera jornada de la Bundesliga. Y el resultado fue una catástrofe: derrota por 1-6 en casa.
Oliver Glasner, técnico del Eintracht, reservó algunas piezas importantes pensando en la Supercopa. Aunque no demasiadas: fueron titulares Santos Borré, Kostic, Sow, Knauff, Lindstrom, Götze... En el banquillo se quedó Kamada, bigoleador ante el Magdeburgo y uno de los mayores argumentos ofensivos del equipo. Sea cual fuere el plan de partido que Glasner tenía, no funcionó: al descanso perdían 0-5.
Mucho se ha repetido, Ancelotti ha hecho incluso hincapié en ello, que el Eintracht llegará a Helsinki con mucho más ritmo de competición que el Madrid, tras haber jugado ya dos partidos oficiales por ninguno los blancos. Pero la contundente derrota ante el Bayern sólo ha creado incertidumbre. “El Eintracht llegó a la nueva temporada tras ganar la Europa League subido en una ola de entusiasmo. Pero se hundió a la primera contra el Bayern. ¿Cómo ha podido pasar esto?”, analizaba ayer en su página web el Frankfurter Allgemeine, diario de referencia de la ciudad, que sentenciaba en su crónica del partido: “En un duelo con el campeón, el Eintracht jugó sin ton ni son”. En Frankfurt toca hacer borrón y cuenta nueva: “No tengo muchas ganas de Supercopa ahora, primero hay que digerir esto”, comentó Markus Krösche, director deportivo.
Resignación con Kostic
El Eintracht llegará a Helsinki, además, con uno de sus mejores jugadores envuelto en rumores, o algo más que rumores: ayer en Italia daban por hecha la marcha de Kostic a la Juventus, si bien desde el Eintracht afirmaban que aún no hay oferta formal y las posiciones se entontraban distanciadas hace días, con los italianos ofreciendo algo más de 10 millones y el equipo de Frankfurt pidiendo no menos de 20, aunque presionado por la situación. Kostic acaba contrato en un año, si no lo traspasa ahora se irá gratis en julio.
La opinión general en Frankfurt indica que el traspaso a la Juventus se hará, pero cuando pase la Supercopa de Europa; la directiva del Eintracht quiere al serbio para intentar sumar un título más a las vitrinas del club, especialmente en un partido que supone la reedición de aquella final de la Copa de Europa de 1960.
El técnico Glasner, resignado con la situación, consciente de que perderá a uno de los jugadores más desequilibrantes de su ofensiva, ya tira de humor. Al ser preguntado sobre por qué retiró a Kostic mediada la segunda parte ante el Bayern, respondió socarrón: “Para que esté en plena forma en Italia la semana que viene”. Luego añadió, ya seriamente: “El objetivo es que esté en plena forma contra el Real Madrid. Filip empezó a entrenarse más tarde que el resto y aún no está al 100% físicamente”. Markus Krösche, director deportivo, repitió que no hay oferta aún: “Por ahora”. Un condicional que refleja lo que es un secreto a voces: Kostic jugará en la Juventus, pero antes Glasner y el club quieren que haga un último servicio para el Eintracht, en forma de Supercopa de Europa.