Crucero del City a cuartos

Con la comodidad esperada, el Manchester City superó al Copenhague (3-1) a velocidad de crucero hasta amarrar en el puerto de los cuartos de final de la Liga de Campeones. Plácidamente. El caramelo en dulce del sorteo no fue rival para el vigente campeón de Europa. Pese a que Guardiola tuvo la mirada puesta en el Liverpool. Hizo siete cambios respecto al derbi de Manchester. Nueve fueron los minutos que bastaron para que los celestes completasen el trámite.

Akanji abrió la lata en el quinto, rematando de volea un córner botado por Álvarez. Fácil, aunque no tanto como el tanto del argentino cuatro minutos más tarde. El ex de River Plate sacó de esquina y Rodri cabeceó al larguero. El esférico llegó nuevamente a Álvarez, que desde el lateral del área disparó a un muñeco con manos de gelatina. A Grabara se le escapó el esférico y éste se coló en la portería. Fin del cuento. Elyounoussi amagó con añadir una pizca de sabor conduciendo un contraataque que él mismo finalizó antes de la media hora. Durante los siguientes minutos el Copenhague se vino arriba, pero el City lo devolvió pronto a su lugar y Haaland sentenció en el tiempo añadido. Bajó un envío en largo de Rodri ante la presencia de dos zagueros. Le dio igual. Se acomodó y marcó con un tiro raso. Lo celebró con una patada al aire a lo ‘Kung Fu’.

Sobró el segundo acto, cuando ambos equipos levantaron el pie del acelerador y el ritmo decayó. Se acabó el brillo de Bobb, y Nunes tuvo que ser sustituido por lesión a falta de un cuarto de hora. Hamilton, de 20 años, disputó su tercer partido de la temporada. Wright, con 18 años, disputó unos minutos más en el tramo final de un choque sin trascendencia, en el que no hubo sorpresa y que solo valió la revalidar la opinión que Neestrup, entrenador del Copenhague, expresó durante la previa. En octavos se encontraron al rival más complicado. “Están un nivel o dos por encima del United o el Galatasary”, a quienes los daneses se impusieron en la fase de grupos. Durante las próximas semanas se podrá comprobar si los celestes también lo están respecto a sus futuros rivales. Y si está a la altura para revalidar el título del pasado curso. De momento, los de Guardiola ya están en cuartos.