Aprobados y suspensos del equipo arlequinado: más de lo mismo

Segundo partido que acaba con la portería a cero, un punto y a esperar a hacerlo valer en el próximo partido, aunque de nuevo será lejos de El Molinón (visita al Huesca el primero de octubre). Ese aspecto, que implica que el equipo ha vuelto a ser solvente y seguro en defensa, es lo mejor que se puede decir del partido del Sporting en Andorra donde tuvo como novedad el estreno de la segunda indumentaria de esta temporada, con camiseta arlequinada en tonos verde agua.

El equipo de Ramírez volvió a mostrarse con un escaso poderío en ataque acentuado por la entrada tardía de Hassan, por ahora el jugador más desequilibrante del conjunto asturiano. La alineación, de nuevo con Pascanu en el lateral derecho en una defensa de cuatro, con las novedades de Jonathan Varane, Pablo García y Fran Villalba en el centro del campo, que aportaron más bien poco.

Así jugaron los protagonistas en este partido en el Estadio Nacional de Andorra:

Yáñez: En su línea de ofrecer seguridad máxima en la portería donde no pasó por problemas.

Pascanu: Sufre cuando tiene que atender la banda. Cumplió de todas formas en tareas defensivas pero fue más bien nulo cuando se incorporó al ataque.

Insua: Regularidad más, como siempre, sin dar opciones a los rivales que intentaron superar su zona.

Róber Pier: Seguro y contundente, resuelve su trabajo con eficacia y procura que el balón salga jugado siempre con sentido.

Cote: Se aplicó fundamentalmente en tareas defensivas, con alguna dificultad, y esta vez le tocó aportar menos en ataque.

Varane: Partido discreto del francés en su vuelta a la titularidad. Se dedicó de manera casi exclusiva a la tarea de contención.

Nacho Méndez: Participativo pero sin la brillantez de otros encuentros. Sufrió mucho porque el balón lo tuvo el contrario.

Fran Villalba: Se dejó ver en los primeros minutos cuando el Sporting más le discutió la posesión al Andorra pero sin acierto y se acabó diluyendo.

Pablo García: Volvió al equipo y en posición más adelantada, incorporado al centro del campo, para aprovechar sus llegadas. Solo tuvo una digna de mención.

Otero: Exhibición de desgaste en muchas zonas del campo pero sin aportar en ataque que es lo que se le pide a un delantero.

Djuka: Tuvo una buena ocasión en un balón que le envió Pablo García pero no llegó. Se dejó ver muy poco en contacto con el balón. No remató a puerta.

Roque Mesa: Sustituyó a Varane y su presencia apenas se dejó notar en la media hora larga que estuvo en el campo.

Hassan: Protagonizó lo mejor del equipo en ataque pero le sobraron regates cada vez que pisó el área. Siempre quedará la duda si desde el inicio hubiera sido más letal.

Dani Queipo: Una buena acción que no encontró rematador en los casi 20 minutos que estuvo en el campo.

Campuzano: Sustituyó a Djuka y dio la sensación de haber entrado más en juego que el montenegrino en lo poco que jugó como Queipo.

Rivera: Entró en la recta final, apenas estuvo diez minutos con el añadido, y entró muy poco en contacto con el balón.