Aprobados y suspensos del Barcelona: Lewandowski reparte a pares

Ter Stegen: Partido correcto sin más del guardameta alemán, que cometió un error imperdonable, ‘regalando’ un balón a Diego López, que asistió a Hugo López para que rematara a placer, pero que afortunadamente apareció Cubarsí para sacar la pelota en la misma línea de gol. Aparte de este grueso borrón, tuvo alguna intervención de mérito, como un despeje de un balón que tocó Cubarsí y que supo reaccionar a tiempo.

Koundé: Espectacular. Está claro que ahora mismo la banda derecha tiene un único dueño. Potente y poderoso, sus combinaciones con Lamal fueron de lo mejor del partido. Tiene todo para convertirse en el mejor lateral derecho del mundo si se lo acaba creyendo.

Cubarsí: Cometió errores, pero quién no los comete con 17 años. Lo importante es que nunca se esconde y que no agacha la cabeza. Tenemos un central para quince años. Salvó al equipo de irse a la segunda parte con dos goles en contra. Lástima que vio una amarilla muy pronto, que le mediatizó su juego. Flick se vio obligado a cambiarlo cuando estuvo a punto de ver la segunda. Entró Christensen.

Íñigo: La peor primera parte que he visto en mi carrera por parte de un central. Todo lo hizo mal, todas las decisiones fueron incorrectas, perdía balones en la salida de balón de manera sistemática, el gol de Hugo duro fue culpa suya y para colmo recriminaba a sus compañeros, cuando el culpable era únicamente él. Seguramente Flick le debió dar alguna colleja en el descanso, porque su segunda parte, independientemente de sus evidentes limitaciones, fue al menos aceptable. Se dedicó a defender y a no a creerse Beckenbauer.

Balde: Hasta que tuvo que abandonar el campo por culpa de una molestias musculares, fue un auténtico puñal desde el carril izquierdo. Esperemos que sea poca cosa, porque con el canterano en el campo, el equipo gana velocidad y verticalidad. El primer gol llegó gracias a un precio cambio de juego suyo a Lamine.

Bernal: Debutó en partido oficial. Y lo hizo además en ‘la silla eléctrica’ de las posiciones del Barça, el pivote defensivo. Al principio, Íñigo se empeñó en querer sacar el balón, ninguneando al canterano. Pero poco a poco, fue ganando protagonismo y mostrando criterio y serenidad, que para un chaval de 17 años es algo digno de encomio.

Casadó: Buen partido del canterano, acompañando a Bernal en el doble pivote. Físico y comprometido, su juego es vital para la presión sin balón. Estuvo muy cerca de marcar, pero la falta de acierto acabó penalizándolo.

Lamal: Salió de Mestalla bajo una fuerte ovación. Bajo esta tesitura uno se puede imaginar el partido del delantero, aunque lo cierto es que Vázquez estuvo muy atento en el marcaje. Pero un crack de este talento necesita poco para brillar, regalando una gran asistencia a Lewandowski en el primer gol y una ruleta mágica en una acción de transición.

Raphinha: Puede que le salgan las cosas bien, regular o mal, pero lo cierto es que su capacidad de trabajo y sacrificio es innegociable. Esa es su mejor virtud y la explota con todas las consecuencias. Si además está a punto de marcar con un fuerte remate desde fuera del área y luego provocas el penalti con una acción absurda de Mosquera, sólo resta aplaudir.

Ferran: Mal partido del ex del City, que además fue silbado en Mestalla, que no olvida su pasado ‘che’. Pese a todo, inició la jugada del penalti con un pase medido al espacio dentro del área a Raphinha. Tuvo un uno a uno con el portero del Valencia, pero tiró al muñeco.

Lewandowski: El delantero polaco se estrenó esta temporada con un doblete. Y no fue un ‘hat trick’ porque Mosquera estuvo atento a la hora de poner el pie cuando se quedaba solo ante el portero. Hizo lo que se supone tiene que hacer un delantero ‘top’.

CAMBIOS

Martín: Buen partido del lateral izquierdo, que debutó en el primer equipo para reemplazar a un Balde con problemas físicos. Supo estar a la altura de las circunstancias, dando además una gran asistencia a Casadó, que desaprovechó sorprendentemente.

Pedri: El canario regresó tras cinco semanas en el dique seco. Su presencia en el campo ofrece versalitidad y control en el juego. Sólo con eso ya vale un potosí, pero además tiene criterio y visión de juego. Remató un fuerte derechazo que pasó cerca del poste.

Christensen: Regresó de central, con más sombras que luces. Vio una amarilla a los cinco minutos de saltar al campo.

Eric: Buenos minutos del canterano, pese a cometer algún error puntual.

Pau Víctor: Sólo tuvo unos minutos, pero corrió como si le persiguiera el demonio.

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