Aprobados y suspensos del Alavés: victoria en una tormenta de goles

Sivera. Buen partido del portero. Nada pudo hacer con los golazos del Sevilla. Fernando también le pudo hacer otro en la segunda parte. Bien colocado y con personalidad bajo los palos.

Gorosabel. Banda larga para el guipuzcoano. Ayudó a sus compañeros de ataque, estuvo contundente en defensa salvo en el gol de Rafa Mir, donde el punta le desbordó antes de rematar con precisión.

Abqar. Buen partido en trabajos de zaga pero con la mala fortuna de meterse el gol en propia puerta. Lamela disparó, le pegó en el pie y acabó dentro. “Estas cosas pasan porque esto no es Segunda”, le dijo luego su entrenador.

Sedlar. Despejó todo lo despejable. Sobre todo cuando el Sevilla colgaba balones y él los atacaba frontalmente. Un baluarte en defensa tanto cuando esta es de cuatro como cuando se ordena una disposición de cinco atrás.

Rubén Duarte. Fundamental en el triunfo. Dio buenos pases a sus compañeros, marcó un gol y en defensa no desentonó a pesar de tener que frenar a Lamela o Suso. Recibió un fuerte golpe en la rodilla derecha y se marchó sustituido.

Benavídez. Daba la sensación de que iba a jugar Antonio Blanco pero García Plaza prefirió meter cemento en la medular. Con él no hay prisioneros y se jugó alguna amarilla. Intenso e implicado, jugó un partido bastante bueno.

Ander Guevara. El metrónomo del centro del campo. Roba balones, ayuda atrás, saca jugadas, combina bien con sus compañeros y llega muy arriba. Hizo un gran partido al igual que el día del Cádiz.

Alkain. La falta de efectivos propició su titularidad. El lunes pasado, con cinco defensas, vio todo el partido desde el banco. Cuando empiece Tenaglia, lo normal es que pierda su sitio en el once. Pero contra el Sevilla fue vertical y jugó muy bien.

Jon Guridi. Kilometrada para el de Azpeitia. Fue el mejor en el Nuevo Mirandilla y hoy rozó la perfección. Presionó, robó, asistió en el gol de Rioja y casi marca en varias ocasiones. Desgaste enorme y mérito reconocido.

Luis Rioja. Encaró, desbordó, centró con criterio y, además, consiguió el primer gol de la temporada del Glorioso con un disparo cruzado al que no llegó Dmitrovic. Vacío, fue sustituido a la vez que Rubén Duarte.

Kike García. Sensacional en todo el partido. Destapó el tarro de las esencias en el primer cuarto de hora de la segunda mitad con una gran pegada. El primer gol, de cabeza. El segundo, encontrando un ángulo imposible para cruzar el balón.

Javi López. Con su entrada por Alkain, se colocó en la banda zurda atacante desplazando a Rioja a la derecha. Como siempre, mucho despliegue físico y sin apenas fisuras en defensa cuando el Alavés estaba echado atrás.

Sylla. García Plaza sabía que, con el 4-2, el equipo tenía que esperar al rival y tratar de hacerle daño a la contra. Por eso sacó al senegalés que también se dedicó a defender el resultado echando una mano atrás.

Antonio Blanco. Perdió la titularidad en beneficio de Benavídez pero salió en la segunda mitad. Tiene criterio con el balón, ocupa muchos metros en el centro del campo y demostró que será un jugador fundamental esta temporada.

Miguel De la Fuente. Salió con muchas ganas y, en cuanto tuvo una ocasión, disparó a la meta de Dmitrovic, que le sacó una buena mano a córner. Con la llegada de Kike García tendrá menos oportunidades y el castellano lo sabe.

Rafa Marín. Se le vio un poco dubitativo en Cádiz pero, ante el Sevilla, entró para apuntalar la defensa. El Alavés terminó con tres centrales y se le vio más centrado y expeditivo. También subió a rematar algún saque de esquina.