Sergi Gómez pisa su sombra

Aguardaban los equipos en el túnel de vestuarios a que el delegado diera el visto bueno para poder comparecer sobre el césped del Sánchez Pizjuán, con el himno de El Arrebato atronando por megafonía, cuando Sergi Gómez cruzaba ese muro que separa por camisetas para ir saludando, uno a uno, a los titulares del Sevilla. El central, igual que Aleix Vidal, visitaba por primera vez a su antiguo equipo con otra camiseta, la del Espanyol. Y, aunque salió derrotado (2-0), sí pudo pisar su propia sombra.

Con el partido completado ante el Sevilla, ya son 540 los minutos que Gómez acumula en este inicio de Liga. Es decir, absolutamente todos salvo algunos de añadido en Son Moix, donde fue expulsado en el 93’, y lógicamente por sanción tampoco la visita del Atlético de Madrid al RCDE Stadium. El año pasado, precisamente a las órdenes de Julen Lopetegui, necesitó cinco meses más, hasta febrero, para sumarlos. Lo consiguió, después de ir jugando en pequeñas dosis, el 13 de febrero, en la vigesimotercera jornada, frente al Huesca.

Ha conectado Sergi Gómez con Leandro Cabrera, su acompañante en defensa. Y también con una afición exigente ante su fichaje. “Estamos fastidiados por el resultado. No lo conseguimos pero la actitud hasta el final fue la de empujar, de querer buscar el gol, y creo que esta es la línea a seguir”, afirmaba tras la derrota ante el Sevilla, en los canales del club. Y advertía: “Si este partido era exigente, el siguiente todavía lo es más. Por suerte, jugamos en casa, con nuestra gente, y eso es importante a la hora de afrontarlo, que todos vayamos a una. Juntos lo conseguiremos”.