El cuarto vals del capitán Melendo

El primer gol de la era Vicente Moreno lo anotó Óscar Melendo a pase de Nico Melamed. Dos jugadores livianos pero con un talento natural para este deporte, que desde pequeños han luchado para contrarrestar los clichés de lo físico. El primero, que hoy cumple 23 años, jugó de mediapunta. Liberado, encontró fácil la asociación con Adrián Embarba, y se sintió más cómodo defendiendo por dentro que por fuera, donde este curso ha tenido más que una pesadilla persiguiendo laterales.

"Las sensaciones fueron muy buenas. Queríamos plasmar las ideas del técnico, pero cogimos ritmo. El entrenador nos da libertad y seguridad con balón, que confiemos en nosotros mismos. Quiere que juguemos a fútbol", comentó el jugador para Espanyol TV. La simpleza de esa última frase hace feliz al mediapunta, que en estas cuatro ya campañas que acumula en el primer equipo las ha visto de todos los colores.

Su talento sedujo a Quique Sánchez Flores, quien lo hizo debutar pero no le dio después demasiada continuidad: 32 en un año y medio, el 80% entrando desde el banquillo. Rubi y David Gallego fueron los técnicos que mejor le entendieron. Con el primero, donde además su rendimiento fue notable, jugó 37 partidos, 32 de ellos de titular. Con el segundo empezó siendo la piedra angular, pero el equipo no funcionó. En total, Melendo lleva ya, pese a su juventud, 108 partidos oficiales de perico. Si este curso juega con asiduidad, a sus 23 años ya se meterá entre los 100 jugadores con más partidos en la historia del club.

El futbolista de Sant Adrià vivió además su primera experiencia como capitán. Después de la sustitución de Diego López al descanso, ausmió el brazalete hasta que fue sustituido, y entonces recayó en el brazo de David López. Vicente Moreno apuesta por jugadores como Melendo, con talento, que quieren el balón y se asocian. Una buena señal para un jugador lleva ya un máster en esto del fútbol y actúa como un veterano.