TENERIFE

El banquillo blanquiazul no resuelve

Solo tres futbolistas lograron anotar un gol saliendo de revulsivo: Dani Gómez lo consiguió dos veces y Suso Santana fue el otro. Ninguno de ellos en este 2020.

JUAN GARCIA CRUZDIARIO AS

El Tenerife no cuenta con ese típico futbolista que, saliendo desde el banquillo, sepa resolver un partido que se ha puesto cuesta arriba. De hecho, solo tres jugadores consiguieron marcar un gol siendo suplentes. Si bien no es de los peores equipos en este curioso dato, lo cierto es que sus revulsivos no han cumplido con su rol.

Es más, en este 2020, ningún jugador que ingresó en la segunda mitad fue capaz de anotar. Los únicos, lo consiguieron el año pasado. Curiosamente, Dani Gomez, hoy un indiscutible para Rubén Baraja, convirtió dos veces en la etapa de López Garai. Su primer gol como blanquiazul, por ejemplo, llegó en el Carlos Belomonte después de sustituir a Ramón Miérez.

Varias semanas después, el madrileño volvió a pedir pista al marcarle al Sporting en Gijón. En aquel partido, Sesé Rivero había apostado por Malbasic, pero en el descanso le dio entrada al joven atacante cedido por el Real Madrid y anotó uno de los goles del triunfo (0-2).

Falta por reseñar el gol de Suso Santana, aunque en este caso no sirvió para sumar. El Tenerife perdía en Riazor y el míster le dio entrada al capitán en el último cuarto de hora para que ejerza de revulsivo. En el 89, el de Taco casi lo consigue porque fue el autor del penalti que empataba transitoriamente el duelo, aunque minutos después, el Depor se llevó los tres puntos dando comienzo a su espectacular remontada.

Esta estadística refleja que los hay peores: Málaga y Lugo solo tuvieron un futbolista capaz de ver puerta saliendo con el partido iniciado, mientras que Cadiz, Extremadura y Deportivo encabezan esta clasificación con siete “revulsivos” cada uno.

Lo más visto

Más noticias