Zornoza: "No pienso en la liga, mi cabeza está con mi familia"

Claudia Zornoza llegó hace dos temporadas a un Levante que revolucionó el equipo para codearse con los grandes. Las granotas están teniendo altibajos en este curso: “Empezamos muy bien y esto nos pilla después de una época mala con la eliminación en la Supercopa y Copa. Estábamos volviendo a renacer y esto pilla en medio de todo”.

La centrocampista estaba siendo importante en el equipo (1.782 minutos y 21 partidos) y su aportación fundamental tras marcar tres goles y repartir cinco asistencias. “Estoy muy a gusto en el club, le tengo un cariño especial”, reconoció. A falta de nueve jornadas para terminar el campeonato, Zornoza afirmó sobre el regreso de la competición: “A ver qué pasa, es una incertidumbre. Esperemos seguir con la liga. Aunque no pienso mucho en ello, mi cabeza está en mi familia. Nos tenemos que adaptar a lo que se decida”. "Hemos estado apuntito de coger al Atlético, pero entre el partido contra ellas y el Barcelona no estuvimos a la altura, hay que ser crítico", espetó. Ahora Zornoza prácticamente ni puede darle patadas a un balón: "La pelota nada, la pelotita del perro y ya está. Tomo el sol en los ventanales para qu eme de un poco. Ni futbol, ni hacer ruido... se echa de menos".

La familia muy lejos

Claudia tiene la cabeza en su ciudad natal, donde está su familia: “Hace una semana y media tuvimos un susto con mi abuela. Es difícil estar lejos y no poder irme porque nos pusieron la situación crítica, está ingresada aunque no es por el virus. No poder estar allí con mis padres es complicado”. "En una situación normal, cojo el coche y me planto en Madrid. Estando las cosas como están tienes que fastidiarte, duele, pero te tienes que quedar aquí, estar distraída y no pensar en ello", sentenció.

Boby, su perro, le hace compañía en estos días de confinamiento: “Te da mucha vida, aunque es muy tranquilo”. Y, por supuesto, los entrenamientos. El Levante lo hace con todas juntas, a través de vídeollamadas: “Lo vamos haciendo a la vez. Es bueno porque es una actividad en grupo y puedes competir para que no perdamos eso. Lo hago en el salón, no tengo jardín ni nada de eso”. "Sólo tenía gomas y poco más. Hago qeso con garrafas de agua, en la mochila leche... es un poco improvisando, con las sillas o mesa... se hace gracioso por lo menos. En grupo son las actividades sin material para que todos se puedan adaptar".

Una rutina que intenta no romper: “Soy bastante casera y estoy acostumbrada. Después de entrenar me aseo, hago la comida, me echo un ratito y saco al perro, lo mínimo. Aprovecho para estudiar la oposición (para guardia civil), el trabajo final del máster o sino toco el piano, o lo intento, y juego a la play. No me da tiempo a hacer todo muchos días. Estoy haciendo más cosas que antes incluso”. Y, sobre todo, intenta no ahogar la cabeza con tantas noticias: "Intento no poner las noticias porque todo es negativo, que si el virus, muertes... desde que pasó lo de mi abuela intento no ver lo que pasa. Yo lo llevo a rajatabla, es algo que a mi no me afetará directamente, pero lo puedes contagiar", reflexionó. La madrileña sabe de la importancia de quedarse en casa, aunque no todo el mundo hace caso: "He visto gente que se salta las normas. Yo no me fui a mi familia y me hace gracia cero que la gente no cumpla las normas. Que la gente haga caso".

Aún queda tiempo, pero Zornoza ya tiene planes para cuando salga: “Lo primero, ir a ver a la familia a Madrid. Pienso en estar un día entero fuera de casa, ir a la playa, que me da mucha paz, y hacer un viaje fuera de España, de cooperación para ayudar”.  Zornoza ya mira al futuro.