Schuster aún no da con la tecla y la afición vuelve a señalarle

El Málaga no levanta cabeza. Ni en Liga, ni en Copa ante un rival plagado de suplentes. No son sólo los pésimos resultados arrastrados desde la victoria ante el Almería en la jornada seis. El juego y las sensaciones que transmiten Schuster y sus jugadores son más que preocupantes. No hay fútbol, no hay solidez, no hay identidad y no se atisba el más mínimo ápice de reacción. La afición señala a Schuster y por segundo partido consecutivo pidió la marcha del técnico alemán. Su lectura de los partidos y sus respuestas durante los mismos también están quedando retratadas.

Desde el vestuario, el mensaje que se intenta transmitir es de unidad. Eliseu se erigió en portavoz para expresar el sentir de la plantilla tras dejar escapar un 3-0 ante Osasuna en Copa: “El vestuario está con el míster y vamos a estar con él a muerte. En diez o quince minutos se nos fue el partido y el equipo se vino abajo moralmente. Hay que levantar la cabeza. Tenemos un partido muy importante ante el Getafe”.