Rooney podría estar de baja hasta cuatro semanas

Fabio Capello, el seleccionador de Inglaterra, y Alex Ferguson, el técnico del Manchester United, pueden respirar tranquilos: parece que la lesión de Wayne Rooney no reviste la gravedad que algunos temían ayer, instantes después del encuentro ante el Bayern Múnich. Sin embargo, la incertidumbre seguirá algunas horas más, ya que no se sabrá el alcance exacto de la misma hasta dentro de un día o dos, cuando le baje la inflamación del tobillo que ayer parecía "una pelota de tenis", según una fuente del club inglés.

El Manchester United prefirió no especular, pero se comenta que podría estar de baja de dos a cuatro semanas. Cuando el pie vuelva a tener el tamaño natural, a Rooney le harán pruebas que descarten definitivamente una lesión grave de ligamentos. El atacante internacional abandonó el estadio ayudado por unas muletas y ayer se le pudo ver también con su tobillo derecho envuelto en una bota protectora. Rooney regresó de Alemania ayer por la tarde y se dirigió directamente al hospital, a donde regresará dentro de un par de días para volver a ser sometido a diversas revisiones.

Se perderá con seguridad los partidos ante el Chelsea, el sábado, y el Blackburn, el 11 de abril, además de la segunda vuelta ante el Bayern el próximo miércoles, vital para las aspiraciones del United, tras caer por 2-1 en la ida.

Alex Ferguson deberá hacerse a la idea de afrontar los próximos partidos sin su delantero estrella. Según su periodo de recuperación, podría no llegar al encuentro ante el Tottenham, al derbi de Manchester y quizá a las semifinales de la Champions, en caso de clasificarse, allá por la cuarta semana de abril.

Rooney es el máximo goleador del Manchester con 34 tantos, casi tres veces más que el segundo de la lista, Dimitar Berbatov, con 12. El búlgaro lo tendrá que jugar todo porque los otros delanteros del equipo, Mame Biram Diouf y Federico Macheda, clave en el tramo final del año pasado, tienen escasa experiencia.