1x1 del Atlético: Oblak, el único rescatable de la hecatombe en Lisboa

Oblak: A los seis minutos ya había tenido que dejar un paradón en el que fue su estadio ante el cabezazo de Pavlidis en el área pequeña. A los 12 no pudo hacerlo en el mano a mano con Aktürkoğlu. Muchas facilidades defensivas. Se salvó antes del descanso cuando Pavlidis disparó al palo en una nueva ocasión clarísima. El inicio de la segunda mitad continuó con el mismo guion, Di María le engañó desde el punto de penalti y el propio jugador argentino tuvo el tercero, pero Oblak salió vencedor en el mano a mano y puede agradecer que buscase el tiro y no el pase a sus compañeros liberados. Bah le remató solo en el área pequeña para el tercero, esperpento defensivo. Y el cuarto llegó en otro penalti. El mejor del Atleti... sin competencia.

Llorente: Tuvo que salir sustituido por lesión a la media hora de partido. El domingo tenía que cumplir sanción y luego llega el parón, por lo que Simeone espera perderle lo menos posible. No vio a tiempo el boquete que se generaba y por el que entró Aktürkoğlu a la espalda de Witsel, era una cobertura complicada.

Witsel: Comenzó con un corte providencial para taponar el remate de Pavlidis. Tiene una inteligencia táctica y de fútbol que le permite, sin ser rápido, adelantarse a la idea del delantero. Pero la defensa acabó sufriendo una barbaridad. Aktürkoğlu atacó a su espalda tras la pérdida en defensa en el perfil izquierdo. Enorme superioridad del Benfica, no se le puede culpar de la derrota, pero el equipo fue un coladero.

Giménez: Su partido menos fino de la temporada, tanto a la hora de adelantar y ganar duelos como con balón, con un pase muy arriesgado que acabó desembocando en la jugada del penalti. No tenía a su lado a Le Normand y con Witsel no mezcló tan bien, aunque se vieron desbordados por la intensidad y la energía lisboeta y el poco nivel del centro del campo. Pese a ello, siempre pone el corazón y acabó achicando aguas con varios cortes providenciales cuando el equipo se echó arriba.

Reinildo: No eligió bien e intentó sacar el balón jugado en la acción que desembocó en el gol de Aktürkoğlu. En esa posición entre el central y el lateral no se le vio ni para sumarse al ataque ni para achicar aguas, con Giménez teniendo que cubrir constantemente el perfil izquierdo. Redondeó el mal partido con el último penalti para el 4-0.

Lino: El más destacado en la primera mitad por ser prácticamente el único en conseguir desbordar desde lo individual. Al Atlético le faltaba romper líneas y el brasileño era capaz de hacerlo por conducción y regate. Su centro que se estrelló en el larguero fue la única ocasión de peligro. Pero en la segunda se fue apagando, nadie fue capaz de superar a su par. De lo más potable dentro del suspenso general.

Koke: No estaba siendo su día. Impreciso con balón y sufriendo físicamente para llegar a las coberturas. Ya había sido suplente en el derbi por estar justo muscularmente. Sin Barrios se ha quedado sin recambio y viene acumulando mucho esfuerzo seguido. Que vuelva pronto el 8 se hace muy necesario. Simeone miró a la cantera y le suplió en el descanso por Javi Serrano, pero el equipo no encontró la luz en todo el encuentro.

De Paul: Abusa a la hora de intentar dar el último pase en lugar de buscar una alternativa más fácil y efectiva. Y así pierde balones que se ven mucho y enfadan al aficionado. Aunque no viene mal que alguien intente algo diferente de vez en cuando. Sustituido al descanso, sus recambios tampoco mejoraron el panorama.

Correa: Sus únicas titularidades son en Champions. Y no le pudo dar ese nervio que tiene al equipo, que además se quedó sin su revulsivo desde el banquillo. Intención sin éxito, apenas se le vio.

Julián Alvarez: Pasan los partidos sin que se le encuentre el lugar ideal para Simeone. No le utiliza como punta, pero perfilado a la izquierda pone mucho trajo con pocas oportunidades de aparecer cerca del área rival. Poco que reseñar en un ataque inoperante.

Griezmann: Comenzó como referencia ofensiva, pero el equipo no era capaz de romper líneas y fue retrasando metros para ir entrando más en juego. Siempre que se le encontró fue en situación complicada y su intento de solución fue aún más rocambolesca. Se le nota sin frescura, jugando muchos minutos. Sustituido al descanso, para el Atlético es una gran noticia su renuncia a la selección para poder descansar en los parones.

Cinco cambios en una hora que no cambiaron nada

Nahuel Molina: La lesión de Llorente le llevó al césped a la media hora de partido. No pudo aparecer en ataque ni colaborar en defensa.

Gallagher: Una de sus primeras acciones fue cometer el penalti que convirtió Di María en el 2-0. Un pisotón que no pudo evitar y aumentó la ventaja de un Benfica que continuó siendo muy superior. Tampoco marcó en el cabezazo de Bah, mirando al jugador del Benfica y no al balón. Su peor noche como jugador del Atlético.

Sorloth: Su entrada no modificó en nada el ataque. Nadie generaba y el noruego tampoco pudo ganar los balones sueltos. Dificultades en los controles, todavía no se acerca a su nivel del Villarreal.

Javi Serrano: Al Cholo no le tembló el pulso en el descanso ante las dificultades de su centro del campo y dio entrada al canterano. Pero el equipo estaba desbordado. Se ofreció y puso esfuerzo, pero no pudo hacer nada ante el huracán portugués.

Giuliano: Tuvo media hora, pero apenas se le pudo ver. El equipo estaba hundido mentalmente y pudo hacer kilómetros, pero sin encontrarse sobre el césped.

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