Alianza Quintana-Mas

El Movistar vivirá una Vuelta especial. La carrera de casa siempre lo es para ellos, pero esta vez tendrá un aliciente: los 100 años de Telefónica. Por ese motivo, por la carretera no se verá el clásico maillot azul del equipo, sino uno blanco, edición especial, para festejar este aniversario durante las 21 etapas, con los edificios de la empresa reflejados en estas prendas. El día grande será el 8 de septiembre, el del desenlace de La Vuelta, partiendo en la contrarreloj desde el Distrito Telefónica para terminar en la Gran Vía madrileña, junto al Edificio Telefónica.

Y, por qué no, el Movistar sueña con que ese día uno de sus corredores ocupe una foto en el podio final. Para ello, trae un bloque compacto, diverso… y con Enric Mas de baza principal. Eso sí, estará escoltado por todo un ganador de La Vuelta: Nairo Quintana, triunfador en 2016. “Daremos el máximo apoyando a Enric en todo momento, y luego tenemos que ser un equipo combativo. Esa es la dirección que llevaremos. Vamos a buscar también opciones con Pelayo y Einer. En las etapas grandes estaremos delante”, dijo Nairo, que compartirá por vez primera equipo con Mas en una grande. “No veo opciones para la general, el objetivo es llevar a Enric adelante, y luego veremos si hay momentos para aprovechar. Hace 12 años hice mi primera Vuelta. Ahora disfruto el momento y estoy en el papel de ayudar a Enric. Es nuestro líder indiscutible, y por él nos dejaremos el pellejo. Le arroparemos con la idea de buscar el mejor resultado para el equipo”, recalcó el colombiano a sus 34 años.

Para Mas (29), el plan es similar al del Tour. El cuarto día, en el Galibier, se esfumó, al ceder tiempo con los de la general y se reinventó, luchando por etapas, siendo combativo y estando cerca de dar en la diana en varias jornadas. “Me divertí mucho en el Tour. Sufrí mucho al principio, pero en la última semana disfruté de un ciclismo que no conocía, el de meterme en fugas y disputar desde la escapada. Lo que me gusta es hacer la general y aquí en la Vuelta iré a por ello”, recalca el balear, y es que el Movistar raramente no tiene a un corredor luchando, al menos, por el top-10 como sucedió en el Tour. “Sin duda me veo con capacidad para ganar la Vuelta, para eso estamos aquí. Sin Pogacar el abanico de favoritos se abre más. El año pasado ganó Kuss gracias a una fuga que le dio un tiempo que luego supo mantener…”, añade Enric, antes de resaltar la importancia de Quintana.

“Tenerle al lado es una tranquilidad, una garantía. Produce una sensación parecida a cuando estaba Valverde. Por su calidad, por su experiencia y palmarés será un corredor importante”, concluyó Enric en un Movistar “muy motivado”. Los otros seis corredores que completan el equipo en esta Vuelta son Carlos Canal (en su primera grande con la M en el pecho), Nelson Oliveira, Einer Rubio, Jorge Arcas, Pelayo Sánchez (que dio al Movistar el que es, por el momento, su único triunfo en una grande en 2024 en el Giro) y Oier Lazkano. Resulta llamativo el caso de este último porque, salvo giro radical, no seguirá en el Movistar, y no es habitual que corredores que se vayan a marchar (al menos en el equipo) hagan la última grande del año. Con Oier, pase lo que pase, la relación es buena y hasta el último día cumplirá, tratando de demostrar la calidad que atesora.

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