El ultimátum que cambió la carrera de Jonas Vingegaard
Karina, la madre del ciclista, reveló en la televisión danesa que fue ella quien ‘obligó' al danés a montar en bicicleta cuando era niño.
La carrera como ciclista de Jonas Vingegaard ha sufrido un meteórico ascenso en las últimas dos temporadas que ha alcanzado su punto álgido durante este Tour de Francia después de que el ciclista danés lograse la victoria en las históricas etapas del Col du Granon y Hautacam en el Tour de Francia en dos jornadas en la que logró derrotar a un Tadej Pogacar que parecía indestructible y en las que parece haber sentenciado la clasificación general.
La gran actuación de Vingegaard, hasta el año pasado un corredor casi desconocido para el gran público, hizo que muchos investigasen sobre los orígenes del joven ciclista danés y que se rescatase un vídeo del año 2017 en el que Vingegaard aparece trabajando en una planta empacadora de pescado mientras entrenaba para convertirse en profesional al no lograr suficientes ingresos en las carreras.
Sin embargo la televisión danesa TV2 fue un paso más allá para conocer los orígenes de la pasión por el ciclismo de Vingegaard después de entrevistar a sus padres, Claus y Karina, tras la victoria de Vingegaard en el Granon, y que reconocieron que su hijo no logró muchos éxitos en sus inicios en el ciclismo. “Cuando competía en niños nunca ganó nada. Si tenía suerte, era uno de los tres ciclistas que sacaba puntos de premio. No solía subir al podio hasta ahora. Es un poco salvaje”, explica Klaus.
De hecho, Karina explica que fue ella quien le lanzó un ultimátum a su hijo para que siguiera rodando en bicicleta en 2012. Un episodio que tiene mucha importancia a la hora de conocer al Vingegaard ciclista que hoy conocemos. “Dos meses antes de que empezase en la escuela deportiva de Ikast me dijo que no quería seguir rodando en bicicleta. Y esa vez le dije: ‘Debes hacerlo, a menos que quieras quedarte en casa y estudiar el décimo grado en la escuela primaria local’. Dejamos que fuese a la escuela deportiva pero tenía que ir allí siempre en bicicleta aunque no compitiese y que, si no se sentía bien, lo dejase. Entonces todo cambió para él durante ese año. Empezó a subirse de nuevo a la bici y mejoró, y entonces ya no se detuvo. Es la única vez que le escuchamos decir ‘Ya no estoy molesto con la bici’”. Un ultimátum que bien puede valer un Tour de Francia para Jonas Vingegaard, que podría darle su segundo Tour a Dinamarca desde que lo ganase Bjarne Riis, también ganador de etapa en Hautacam cuando subió a lo más alto del podio del Tour en 1996.