TOUR DE FRANCIA | ETAPA 5

Día aciago para el Jumbo... y Roglic, con el hombro dislocado

Averías, caídas... y todavía con el amarillo. El Jumbo sufrió su peor jornada de este Tour, y gracias a Van Aert, que sigue líder, minimizaron las pérdidas.

Arenberg
GUILLAUME HORCAJUELOEFE

Apenas separaban quince metros los autobuses del UAE y del Jumbo en el parking a las puertas, literalmente, del bosque de Arenberg, repleto de curiosos con y sin carrera, al ser una de los tramos más espectaculares de la París-Roubaix. En el del equipo neerlandés esperaban los padres, y el hijo, de Wout van Aert. El pequeño Georges, en su carrito vestido con el maillot amarillo, ajeno a todo lo que estaba pasando.

Su padre, móvil en mano, gritó de felicidad después de que su hijo salvara el liderato. Fue la única alegría del Jumbo en un día aciago, y de no ser por el propio Van Aert pudo ser mucho peor. Él mismo tuvo un día frenético, yéndose al suelo cerca de empezar los tramos de pavés y, poco después, evitando de manera milagrosa el accidente con un coche del DSM.

Su compañero Vingegaard tuvo una avería, y cambió de bicicleta a dos compañeros: Van Hooydonck (mide 1.93, por los 1.75 de Jonas) y Kruijswijk. Y, finalmente, esperó al coche para tener una suya. Roglic seguía por delante... hasta que se fue al suelo tras toparse con una protección rellena de paja. Se dislocó el hombro y, pese a que fue recolocado y pudo acabar la etapa (tras llegar a usar la silla de un espectador para llevar a cabo dicha acción), esta noche será clave comprobar si hay dolor.

Lo más visto

Más noticias