Sorpresa mayúscula: Lillard, a los Bucks de Antetokounmpo
En uno de los traspasos más importantes e inesperados, por el destino de Lillard, de los últimos años, los Bucks juntan a dos superestrellas. Los Suns facilitan la operación como tercer equipo implicado.
Era el nombre propio del mercado de la NBA este verano, ya otoño. Damian Lillard, después de todos los rumores y declaraciones que le colocaban antes o después, y de manera casi inevitable, en Miami, hace as maletas a la otra punta del país. Al norte, en el estado de Wisconsin, con un destino totalmente inesperado: los Milwaukee Bucks de Giannis Antetokounmpo. El equipo que ganó el anillo en 2021 y que en las dos últimas temporadas ha visto como las lesiones hacían que se quedasen cortos en su búsqueda de otro título, juntan ahora a dos superestrellas de la Liga y vuelven a colocarse en la pole entre los aspirantes al título. El jugador, de 33 años, buscará ganar el primer anillo de su carrera después de 11 temporadas ininterrumpidas en los Portland Trail Blazers, el equipo que le drafteó en 2012 y con el que logró llegar a las finales del Oeste en 2019 como su mejor resultado.
El traspaso, que lo adelantó el periodista de ESPN Adrian Wojnarowski, ha sido posible gracias a la intervención de una tercera franquicia, los Phoenix Suns, que completan una operación a tres bandas. Los Bucks se quedan con la pieza más importante, Lillard. Los Blazers se llevan a Jrue Holiday, Deandre Ayton, Toumani Camara, una primera ronda sin protección de 2029 y dos opciones de cambiar sus elecciones de draft en 2028 y 2030, Todas ellas de Milwaukee. Y los Suns reciben a Jusuf Nurkic, Grayson Allen, Nassir Little y Keon Johnson.
Los Bucks aplacan de un plumazo las supuestas intenciones de Giannis Antetokounmpo de dejar el equipo a medio plazo. La estrella griega había realizado declaraciones en los últimos días en las que dejaba en el aire que pasase el resto de su carrera en la franquicia de Milwaukee. Lo cierto es que los otros hombres fuertes de la plantilla estaban en un momento de sus carreras en los que lo normal es que fuesen hacia abajo. Khris Middleton (32 años) no ha vuelto a ser el mismo tras las lesiones que lleva sufriendo desde el años pasado. Jrue Holiday tiene 33 años y Brook Lopez 35. El cambio es el de Jrue, uno de los mejores bases de la Liga, especialmente en defensa, por Lillard, un jugador que cuando está en forma (también suele arrastrar problemas de lesiones) está a un nivel superior.
Los Blazers logran un muy buen jugador joven, el pívot Deandre Ayton (25 años), que se marcha de Phoenix después de tener varios encontronazos con el entrenador anterior y con la franquicia, en este caso por su renovación, y donde no supieron sacarle todo el potencial que se esperaba de quien fue el número 1 del draft de 2018. Según Wojnarowski, el que tiene las horas contadas en Portland en Holiday, por quien intentarán sacar algo más (jugadores o rondas). El veterano base no concuerda con la estrategia actual de la franquicia de Oregón, que ha entrado en reconstrucción y quiere armar un bloque joven de futuro. Holiday puede ser una pieza importante para cualquier aspirante al anillo este mismo año. Y los Suns, que tiene tres grandes nombres (Kevin Durant, Devin Booker y Bradley Beal) dominándolo todo, suplen a Ayton como pívot titular por Jusuf Nurkic y suman más fondo de armario a una plantilla que el año pasada se quedó claramente corta de efectivos en playoffs.
Por último, hay otra protagonista, en este caso negativo, en este traspaso. Se trata de los Miami Heat, el equipo que más quería a Lillard y al que más ganas tenía de ir el base. Pero una vez más, y ya vana unas cuantas temporadas, en South Beach, Florida, ven como otra estrella se les escapa de entre las manos. Un equipo que ha jugado dos de las cuatro últimas Finales y que seguramente estén a una pieza de pelear realmente por el título, no acaban de rematar en los despachos, dirigidos por el otrora Rey Midas de la NBA, Pat Riley.