Minnesota, de decepción a equipo sorpresa

La NBA tiene esa facilidad para crear narrativas, tanto en los mejores casos como en los peores. La franquicia de Minnesota ha pasado a formar parte de la historia, con uno de los peores traspasos de la NBA moderna, el fichaje de Rudy Gobert. A cambio, las rondas de draft de 2023, 2025 y 2027, la posibilidad de intercambiar la de 2026 y una primera ronda de 2029, protegida top 5. A ello había que sumar los jugadores que estuvieron involucrados en el intercambio: Malik Beasley, Patrick Beverley, Jarred Vanderbilt, Leandro Bolmaro y los derechos del draft de Walker Kessler. Este joven pívot que explotó la temporada pasada consiguiendo mejores números que el interior francés. El pasado curso los Timberwolves fueron barridos en primera ronda de los playoffs del Oeste por los Denver Nuggets, que acabarían consiguiendo el anillo, y las sensaciones no eran buenas.

La temporada 2022-2023 se cerraba con muchas dudas sobre si Gobert y Towns podían jugar juntos. Los números estaban en contra de esta pareja: mejor balance de victorias/derrotas cuando uno de los dos no estaban en el partido. El Mundial no hizo mejorar las previsiones para esta temporada. Gobert fue inservible para una Francia eliminada en primera fase; Towns tuvo momentos buenos pero acabó con mucha irregularidad el torneo; y Edwards fue el líder de una selección estadounidense que perdería tres partidos. En la pretemporada apostaron por mantener el bloque de interiores con la renovación a Naz Reid, dejaron salir a Nowell y Prince para recibir a Milton y Troy Brown Jr. La temporada ha comenzado con el mismo balance que la anetrior, 4-2, pero los rivales de entonces (Oklahoma x2, Utah Jazz, Spurs x2 y Lakers) no fueron de tanta entidad como este año.

El debut de este curso no fue el mejor (derrota 94-97 frente a Toronto Raptors), dando lugar a las primeras críticas. Entre Edwards y Towns terminaron con un 16 de 52 en tiros de campo y sólo 21 puntos desde el banquillo. Parecía que la crisis llegaba para los chicos de Chris Finch, ya que el calendario de las siguientes semanas no era el idóneo para recuperar las sensaciones. Lo bonito de la NBA es que nada está escrito y eso es lo que ha ocurrido en este caso. Sólo ha venido una única derrota más frente Atlanta Hawks, en un partido que se dejaron remontar cuando llegaron a ir ganando de 21 puntos en el tercer cuarto. Los otros cuatros partidos han sido victorias, primero frente a Miami, Denver y Utah con bastante autoridad. La última frente a Boston forzando la prórroga para conseguir quitar el invicto al equipo de Joe Mazzulla.

El partido frente a los campeones fue un paseo en su cancha: a minutos de acabar ganaban de 40 puntos. En ese partido dejaron en muy malos porcentajes a Jamal Murray y Michael Porter Jr, y Jokic acabó con 11 de 23 en tiros de campo. La misma situación vivida por los Celtics, de quienes únicamente Tatum fue capaz de anotar por encima del 50%. En la prórroga decidió Anthony Edwards con 8 puntos consecutivos, además de una asistencia y de forzar un salto con Tatum que acabó ganando.

Las claves de este equipo pasan por la defensa, actualmente la mejor en el rating defensivo de la NBA, permitiendo una media de 101 puntos por partido. El trabajo defensivo viene encabezado de Jaden McDaniels, su versatilidad le permite poder defender a las cinco posiciones del campo. Los rivales tiran sólo un 33,3% de 2 puntos cuando los defiende McDaniels, un 16,6% peor de lo esperado. La mejor noticia para los aficionados de los Wolves es haber recuperado a Gobert como gran referencia defensiva (2,2 tapones y 8,5 rebotes defensivos). Y Nickeil Alexander-Walker está siendo capaz de aportar puntos en ataque y frenar a los rivales con un tapón por partido.

En el apartado ofensivo el equipo está comenzando a entenderse mejor. Mike Conley, base titular, ha perdido solamente un balón en los seis partidos y generado 26 asistencias (mejor promedio de asistencias/pérdidas de la liga). La gran estrella de este equipo es Anthony Edwards, el número 1º del Draft de 2020 que se ha consolidado como una de las grandes estrellas de la liga. Ant-Man está logrando sus mejores números en puntos (28,2), asistencias (4,8), rebotes (6,7) y sus mejores porcentajes (52% en tiros de campo con un 47,2% desde el triple). A su lado Karl-Anthony Towns tiene en un rol más secundario, con menos tiros y peores porcentajes. En caso de que saliera alguna estrella de la franquicia, el dominicano tiene todas las papeletas.

Los próximos partidos de esta semana pueden ser claves para marcar el techo del equipo, cuyo objetivo es asegurar un billete directo a playoffs y evitar a los cocos de la conferencia. Tienen por delante a Pelicans, debilitados con la baja de McCollum, Spurs en el trofeo In Season y un back-to-back con los Warriors. De momento, han tenido el 13º calendario más fácil de la NBA, pero le espera el décimo mejor hasta final de temporada, el tercero de la conferencia Oeste. Este año, si todo sigue por el mismo camino, los aficionados de los Timberwolves pueden soñar con volver a ver a su equipo en unas semifinales de conferencia dos décadas después de aquellos míticos Wolves de Kevin Garnett.

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