Los Raptors fuerzan la primera derrota local del curso de los Mavs

Los Mavericks dejan a un lado la calidad de intocables que habían adquirido jugando en su casa, el American Airlines Center de Dallas, al caer por primera vez allí esta temporada frente a los Raptors. El combinado canadiense se lleva de este viaja a Texas, porque el fin de semana ya había ganado a los Spurs de Wembanyama en una pugnada prórroga, dos valiosas victorias.

Para los de Kidd este resultado (116-127) supone el quedarse con un balance clasificatorio de 6-2. Sólo habían caído anteriormente ante los Nuggets, vigentes campeones. Toronto está ahora igualada: cuatro victorias, cuatro derrotas.

Los Raptors supieron sacar tajada de los malos porcentajes por ambos lados en la línea de tiros libres, especialmente preocupante en el lado local durante la segunda mitad, y, sobre todo, ganando las segundas oportunidades, capturando doce rebotes más que los Mavs -quince de sus cincuenta fueron ofensivos- y transformándolos en puntos más sencillos. Ésas fueron las claves.

Pascal Siakam fue el motor del plan de Darko Rajakovic. El alero camerunés, que desde que ganaron el Anillo en 2019 ha tenido un rendimiento irregular y siempre se piensa en él como moneda de cambio en el mercado, estuvo en el que ha demostrado que puede ser su nivel del que no bajarse. Metió muchas de las que tuvo (15/25), tanto en penetraciones como en la media distancia, y diversificó recursos cuando la defensa se cerró sobre él. 31 puntos, 12 rebotes y 5 asistencias. Otro alero alto, Anunoby, le secundó con 26 tantos. Schröder (18) y Trent (16) destacaron por fuera.

Trent había sido el que, con una bandeja en contacto, había dado carpetazo al primer cuarto. Y los Mavs, moviendo bien su ataque, iban seis por encima. El intercambio de triples y la irrupción de alguien tan disruptivo como Chris Boucher, autor de siete puntos en esa franja, elevaron a los Raptors de forma momentánea en el marcador. Dallas se mantuvo a la espera.

Richaun Holmes saltó un puesto en la rotación por la ausencia del joven pívot Dereck Lively y tuvo su protagonismo ante Pöltl antes del descanso. Entre choques bien entendidos y acierto de cara al aro a regañadientes el pequeño impulso de este interior había ayudado a mantener a los Mavs en el encuentro antes del descanso. Aunque justo una pillería de Siakam y otra de Anunoby desequilibraron la balanza hacia el lado rojo en el parón.

Toronto subió las líneas en defensa y fue más incisivo de cara al aro, con más fuerza, como si se hubieran tomado las espinacas de Popeye en el vestuario. Grant Williams había parado lo irremediable anotando dos triples, pero para los Raptors fue sólo una cuestión de tiempo lo de terminar con la batuta en sus manos.

Un 0-11 de parcial a mitad del tercer cuarto rompió la bien avenida igualdad de este encuentro. Y lo pintaron entre Siakam y Anunoby, para que la autoría quede redonda. A partir de ahí sólo vimos trazos vagos por parte de los Mavericks. Un punto en el que se vieron con nitidez fue en las faltas personales: del 19/31 con el que acabaron los de Kidd en tiros libres 14/24 fueron en la segunda mitad. La distancia que habían puesto los canadienses con su rival no se cerró en ningún momento de la jornada. Ni siquiera una actuación conjunta de 53 puntos entre Doncic (31) e Irving (22), sin demasiado que achacarles a ellos, marcó una remontada; ya se habían dado dos en los partidos anteriores, a la tercera fue la vencida (y viceversa, en este caso).