Juancho ve la luz

El techo de los Raptors es muy bajo, aunque el de Juancho Hernangómez no debería serlo tanto. Todo un campeón del Eurobasket, parece condenado al ostracismo en una competición en la que no importa mucho lo que hayas conseguido en el baloncesto FIBA. De una forma u otra, el menor de los hermanos campeones está disfrutando de algunos minutos en Toronto gracias a las lesiones: Precious Achiuwa, Scottie Barnes, Otto Porter Jr. y Pascal Siakam, hombres que comparten posición con el español, están en el dique seco, por lo que el alero ha estado en pista durante más de 30 minutos por segundo partido consecutivo y en los últimos seis encuentros suma casi 25 de media. No está mal para un hombre que acumuló 34 minutos totales en los primeros 12 asaltos, saltanto a pista en solo 5 de ellos, superando una sola vez los dobles dífitos de tiempo en pista y condenado a pasarse la mayor parte del año mirando como sus compañeros jugaban al baloncesto.

Las cosas parecen haber cambiado, al menos ligeramente. Nick Nurse, campeón del anillo en 2019 (con Sergio Scariolo en el banquillo, recordemos), ha dado entrada a Juancho, ya sea por las lesiones o no, en la rotación de los Raptors; y el español ha respondido para irse a 5,6 pnutos, 6,2 rebotes y un 48% en triples. El español no está perfecto, y no acierta en los triples (apenas un 27%), pero es fiabel para su técnico, cumple lo suficiente en defensa, ayuda a sus compañeros y mejora con el paso de los partidos: 10 puntos y 9 rebotes en la derrota ante los Hawks y 10+10 en la sumada ante los Nets, la cuarta en los últimos seis partidos para unos Raptors que no dan para más. Se ha combinado en un 9 de 18 en tiros en estos dos últimos choques, ha atrapado hasta 19 rebotes, 8 de ellos ofensivos y se encuentra en un nuevo nivel de confianza y en sintonía con sus compañeros.

Son buenas noticias para Juancho, que de una forma u otra necesita regularidad, continuidad y volver a ser fiable en el tiro exterior. Es la primera vez que encadena dos partidos consetivos de dobles figuras en anotación desde mayo de 2021, cuando anotó 14 y 11 puntos a Pelicans y Grizzlies respectivamente. Algo simplemente positivo para un jugador que ha disputado los 12 minutos del último cuarto y sigue sumando oportunidades. Es probable, lo sabemos, que vuelva a ser relegado a una posición menor cuando vuelva la ingente cantidad de jugadores lesionados de los canadienses (que también tienen en el dique seco a Fred VanVleet, algo que no afecta a Juancho), pero en el mejor de los casos, no descolgarse de la rotación y seguir contando con la confianza del entrenador cuando esto ocurra sería algo ideal. Ni 30 minutos, ni una estancia eterna en el banquillo. Como dijo alguien muy sabio, en el término medio está la virtud. Ahí queda eso.

Más allá de la situación de Juancho, los Raptors perdieron, aunque siguen viviendo de las rentas y están octavos de la Conferencia Este (9-9). Muy bien entrenados, competirán con cualquiera y lo harán todavía más cuando se recuperen sus jugadores, esenciales en la rotación. Esta vez sufrieron a Kyrie Irving, que sigue mejorando tras su polémico retorno tras su todavía más polémica recomendación antisemita: 29 puntos, con 11 de 16 en tiros de campo y 5 de 8 en triples, muy bien. Nic Claxton volvió a sumar en la zona (14+12), Royce O’Neale solo anotó triples (5, en 8 intentos, además de 7 asistencias y 4 robos), Kevin Durant estuvo discreto (12+7+5) y Ben Simmons continuó con esa versión suya tan extrañamente buena: 14 tantos, 6 asistencias, 7 de 9 en tiros y +15 con él en pista. Un poco de todo en un partido que los Nets resolvieron en el tercer cuarto (25-39 de parcial para un 76-91) para ponerse 9-10, muy cerfca ya del 50% de victorias. Y con ganas de más. Igual que Juancho, claro.