Draymond explota contra Sabonis: “Le he perdido el respeto”

Los Warriors están en semifinales. Parece mentira, pero nada puede con ellos: han conquistado el Golden 1 Center en el séptimo partido y han conquistado dos partidos fuera de casa tras no cerrar la serie en el sexto y tener un récord de 11-30 en regular season fuera del Chase Center. Otra increíble gesta de una dinastía que nunca termina, que lleva 28 series consecutivas ganando al menos un partido fuera de casa y sin perder en el Oeste desde 2014, temporada en la que salió Mark Jackson del banquillo para dar cabida a un Steve Kerr que está invicto en su Conferencia. Son 4 anillos en 8 años, 6 Finales y dos sonadas ausencias en playoffs que fueron, al fin y el cabo, el descanso previo al impulso de una nueva conquista, la del año pasado. Y así, como vigentes campeones, siguen vivos.

Ha sido la eliminatoria de Stephen Curry y sus 50 puntos en el asalto definitivo. Pero también una marcada por el afrentoso pisotón de Draymond Green en el pecho de Domantas Sabonis. La acción significó un partido de sanción para el ala-pívot, reincidente en este tipo de altercados. Pero los Warriors sobrevivieron igual: en su retorno, Green salió desde el banquillo por decisión propia, consensuada con Steve Kerr. Hasta el séptimo, cuando se hizo obvio que necesitaban más energía de inicio y que la titularidad de Jordan Poole no estaba saliendo de forma ideal. Draymond ayudó a frenar el ímpetu inicial de los Kings y se fue a 8 puntos, 6 rebotes y 8 asistencias en el séptimo encuentro. Jugó casi 38 minutos, sumó también 2 robos y se fue con un +25 en pista. Casi nada.

Draymond se vuelve a reivindicar, vuelve a jugar bien tras una sanción (ya lo hemos visto más veces) y se convierte, otra vez, en un pilar fundamental de la dinastía. Junto a Stephen Curry, Draymond Green y Steve Kerr ha sido una de las figuras inamovibles de un proyecto inolvidable, una lista en la que se puede añadir a un Andre Iguodala que está en su última temporada, con muchos problemas físicos pero opciones de conquistar su quinto anillo, el mismo que todos los compañeros mencionados. Algo extraordinario si se consigue y que tiene ahora un nuevo examen: los Lakers de un viejo conocido, LeBron James, con el que ya se enfrentaron en 4 Finales consecutivas (de 2015 a 2018). Otra cita para la historia.

Antes del nuevo capítulo de la rivalidad, Draymond se refirió a Sabonis tras la conclusión de la serie ante los Kings. Y no precisamente de buenos modos, ya que hizo gala de su consabida verborrea para criticar a la estrella, que no ha cuajado una gran serie a pesar de su esfuerzo en el séptimo asalto (22+7+8). Green ha criticado al pívot por irse sin saludar tras la eliminación de los Kings y dice haberle “perdido el respeto”. De una forma u otra, el lituano no saludó a Draymond y se fue por el túnel de vestuarios sin mediar palabra con él. Algo que no ha gustado a su némesis. Pero en lo que quizá haya tenido algo que ver ese bochornoso pisotón. Por lo que sea.