GRIZZLIES 106-SPURS 98

Con un toque de show de Ja Morant

Un mate del base de los Grizzlies por encima de Wembanyama, la imagen de un triunfo con poco brillo de los Grizzlies. Buenos minutos de Santi Aldama.

Después de esa efervescencia de cuatro victorias que acompañó al regreso de Ja Morant tras cumplir su sanción de 25 partidos, los Grizzlies se dieron de bruces con una realidad en forma de calendario: Nuggets, Clippers y Kings, tres derrotas seguidas y el furgón de cola del play in, la décima plaza del Oeste, otra vez muy lejos para un equipo que fue segundo de su Conferencia las dos últimas temporadas pero que esta vez, entre la ausencia de Morant y una sangría de lesiones, tiene la temporada casi perdida. Casi: queda mucho, pero está a cinco partidos y medio de esa décima posición. Para tener alguna opción si todo vuelven a funcionar, que está por ver, los Grizzlies tienen que ganar a rivales como los Spurs. Y lo hicieron (106-98).

El partido, en todo caso, fue feo. Nada de lo que presumir. Si acaso, quedó apañado por sus highlights. El público quería ver a Ja Morant y Victor Wenbanyama en colisión… y los vio. El pívot francés le puso un tapón al base en el primer tramo del partido, pero se llevó en el último cuarto uno de esos mates que muy pocos se atreven a hacer contra él. “Es muy pequeño, así que es difícil verle venir. Y es muy rápido”, dijo después Wemby. Morant le dedicó la jugada al público: “Era lo que los aficionados querían ver, así que fue como mi regalo tardío de Navidad”.

Ese mate, la imagen de un partido con poco más que celebrar, marcó además el +18 (88-70) para unos Grizzlies que, ya en el último cuarto, se quitaron finalmente de encima, en los mejores minutos de Morant, a un rival inferior pero pegajoso, que no terminó de irse hasta ese tramo final. Antes, hubo demasiados minutos de malos ataques de los dos equipos. O de buenas defensas… o de un poco de las dos cosas. Pero los Spurs solo son firmes atrás cuando está Wembanyama en pista. Y el francés solo jugó 26 minutos. En cuanto se sentó, Jaren Jackson Jr encontró caminos en el aro. Y con un poquito de acierto exterior y un Desmond Bane (24 puntos) liberado por la falta de especialistas en las alas de su rival, la cosa acabó cayendo por su propio peso. Con 26 puntos y 10 asistencias de Morant y un muy buen partido de Santi Aldama, que jugó más de 28 minutos y acabó con 13 puntos y 11 rebotes.

En los Spurs, muchos problemas (y más con Zach Collins lesionado) en los minutos sin un Wembanyama que terminó con 20 puntos, 7 rebotes, 4 tapones y otra de esas canastas (un triple sobre un solo pie) que se suman a su ya extensa colección de acciones en versión cómo-demonios-ha-podido-hacer-eso.

Más allá, muy poco. Malaki Branham se lesionó y Devin Vassell (otra vez) no hizo lo suficiente (solo 8 tiros en 34 minutos). Los Spurs no tienen suficiente potencia de fuego en ataque ni armazón en defensa para sostenerse a pesar de que lo intentan y ponen el esfuerzo necesario. Con eso, ganaron el primer cuarto (20-23), unos minutos horrendos de los Grizzlies, y llegaron más o menos vivos al último tercio del partido. Pero nada más, y es un 5-28 para un equipo que no tiene más razón de ser que los minutos que juega Wembanyama. Los Grizzlies quedan con un 11-22 que les aleja de las cloacas pero que todavía no les pone en posición de salvar un curso muy difícil. Veremos dónde están en un par de semanas.

Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todas las claves deportivas del día.

Lo más visto

Más noticias