Bienvenidos al circo de Doncic

Luka Doncic llegaba al inicio de temporada con no muy buenas sensaciones. La fea eliminación del Mundial, siendo él expulsado en el partido de cuartos ante Canadá. Los problemas físicos recurrentes y una supuesta lesión en el muslo que arrastra desde la temporada pasada y que, según él, no se ha curado. Y una pretemporada en la que perdieron todos los partidos menos uno y que tampoco dejó demasiados motivos para la esperanza en cuanto al juego. Todos esos nubarrones los ha despejado el esloveno en un par de días, lo que ha tardado en jugar sus dos primeros encuentros de la nueva temporada. En el primero, le robó todo el protagonismo a Victor Wembanyama con un triple-doble (33+13+10). En el segundo, ha demostrado que puede ser el mejor jugador de la Liga. Porque su actuación en la victoria ante Brooklyn Nets (125-120) ha sido monstruosa.

En un encuentro igualadísimo, al que se llegó con empate a los últimos segundos, la magia de Luka fue la que marcó la diferencia. A 26 segundos del final, con 120-120, metió uno de los triples más complicados e inverosímiles que se recuerdan. Desde la línea de banda, perfectamente defendido por su excompañero Dorian Finney-Smith, quien le tenía totalmente fuera de rango de tiro. Tanto es así que incluso Jason Kidd aseguraba después del partido que estuvo a punto de pedir tiempo muerto, pensando que iban a perder la posesión. Pero con Doncic nada es imposible. El esloveno, justo antes de terminarse el tiempo de posesión, se sacaba de la manga un truco nunca visto. Un tiro con su mano derecha que más que un triple parecía un gancho desde el perímetro. Una cosa surrealista que se metía en el aro después de dar en el tablero. “Trabajo ese tiro”, decía después el esloveno con una sonrisa.

El American Airlanes Center se venía abajo entre gritos de MVP. Acaba de comenzar la temporada y no significa nada, pero de momento él es el MVP de este inicio de curso. Hoy se quedó cerca del triple-doble de nuevo, aunque su estadística es aún más impresionante que ante los Spurs: 49 puntos, 10 rebotes y 7 asistencias, con un sobresaliente 9/14 en triples. De hecho, las últimas cuatro canastas en juego de los Mavs fueron cuatro triples del esloveno. “Lo que hace especial a un equipo es tener a tipos que puedan hacer estos tiros, como nos hizo Donovan Mitchell el primer día y como ha hecho Luka hoy”, explicaba resignado Jaque Vaughn, que ve como su equipo ha perdido los dos primeros partidos después de encajar dos triples en los últimos segundos.

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