NCAA

Aday Mara, ante otra temporada bajo la lupa de su entrenador

Mick Cronin, técnico de UCLA, repasa cómo es la pretemporada de Aday Mara, el prometedor pívot español que desde allí busca con ahínco la NBA.

La segunda temporada del prometedor Aday Mara en la NCAA con UCLA vuelve a resucitar viejas incógnitas. De su experiencia el año pasado quedan demasiadas suplencias, toques de atención y un progreso en duda que se espera que cambie al pasar de curso. El ex del Zaragoza, de 19 años, se quedó con las ganas de presentarse a un draft que se suponía que le iba a tener en las primeras posiciones y en cuyas predicciones se fue hundiendo conforme los ojeadores veían que no tenía impacto alguno en los Bruins. El verano pasado comenzó tarde, porque el litigio que mantiene con su club de origen le llegó a conseguir la luz verde para jugar con la universidad a escasas horas del comienzo de los partidos oficiales; en este 2024 el trabajo se lleva realizando desde mayo, a fuego lento, y llega hasta este octubre en el que los equipos se ponen de largo.

Mick Cronin, el entrenador de este programa deportivo, hizo un repaso a la situación de Aday Mara con los medios locales que dieron cobertura al media day de su conferencia (la Big Ten, a la que este año se unen tanto ellos como Washington, Oregon y USC).

“Ha hecho un gran trabajo desde que volvió de España, con la que jugó en categoría sub-20 en julio”, comenzó.

Explicó el mandamás del banquillo que el pívot maño ha trabajado individualmente con Dave Andrews desde que éste fue nombrado director de preparamiento físico en el mes de mayo.

“No importa todo lo alto que seas si no te aferras a eso para que de verdad se convierta en un factor positivo, y de eso se dio cuenta el año pasado. Además tiene que desarrollar su resistencia y su fuerza para competir en el baloncesto universitario porque esto es duro. Él no tenía manera de comprobar cómo de duro iba a ser, así que le ha tocado trabajar fuerte”

“Todavía se está recuperando de un lesión menor en el pie y ha comenzado ahora a hacer cosas en pista, así que eso también es prometedor. Cuanto antes le tengamos a pleno rendimiento, mejor irá”

“Los entrenamientos de pretemporada en el baloncesto universitarios son duros. No sólo es ponerte en línea y correr, nos vamos a la cancha y jugamos duro. Son tres o cuatro horas y se pierde peso. Como Aday no ha sido capaz aún de hacer eso, se ha quedado al margen haciendo pesas, flexiones o abdominales”

“Está totalmente implicado en su cuerpo. Tiene una gran personalidad. Es un chico divertido. Siempre hace flexiones para que las vea y me dice que su novia está notando cómo le crecen los bíceps. «Créeme, entrenador, se da cuenta». Es un chico divertido, pero además está trabajándoselo”

“Lo más importante es que uno mismo se conciencie. Él lo ha hecho, sabe que mejorar en términos de acondicionamiento y fuerza además de como jugador. Los chicos que no tienen esa mentalidad no mejoran, sólo puedes ayudar a los que están implicados. Los entrenadores no mejoran a los jugadores, son los jugadores los que se mejoran a sí mismos. Que sepan en qué áreas deben trabajar. Ése era mi temor. Porque él estaba muy arriba en los ‘rankings’ y a lo mejor pensaba: «Me tienes que poner a jugar porque estoy muy arriba». Ha tenido la visión para darse cuenta de que no estaba preparado del todo, que tenía que madurar. Para una persona joven no es fácil darse cuenta. Su actitud es buena y por eso soy optimista”

“Cuando vuelva a las canchas y sepa posicionarse, mantener a raya a los que debe defender, será importante porque con su altura (2,20) tiene que ser un buen jugador. No considero que vaya ser alguien dominante esta temporada, pero sí tiene que ser un factor y ya de alto nivel”

En la anterior campaña las expectativas que se tenían con Mara de cara al Draft 2024 se fueron diluyendo conforme pasaban los partidos y el técnico principal no le sacaba el jugo. Además tenía buena competencia con Adem Bona, un pívot potente de nacionalidades nigeriana y turca que acabó elegido por los Sixers en el 41ª posición. Aday no progresó como Cronin esperaba y sólo promedió 9,6 minutos por cita, en 28, con 3,5 puntos y 1,9 rebotes.

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