Willy: “Estoy preparado para liderar a este equipo”

Willy Hernangómez (Madrid, 1994) es uno de los grandes referentes de España este verano tras el adiós de Pau y Marc Gasol. El pívot de New Orleans Pelicans (2,11 metros) llega con ganas de liderar una Selección en la que es el tercero en internacionalidades con 70 partidos, cinco torneos internacionales y dos oros (Mundial y Europeo) y dos bronces (continental y olímpico).

Sexto torneo internacional ya con la Absoluta, pasa rápido el tiempo, ¿no?

Sí, la verdad es que hace nada que debuté con La Familia, en 2014, y ocho años después sigo compitiendo con la misma ilusión. Aunque, obviamente, con un rol diferente, de mucha más responsabilidad. Estoy muy motivado e ilusionado porque es un reto muy bonito el que tenemos por delante y el que tengo yo desde mi papel. Me apetece mucho.

Es usted el tercer jugador en internacionalidades en esta Selección con 70, solo por detrás de Rudy Fernández y Sergio Llull, ¿pesa ese cartel de veterano?

No, es ley de vida. Empiezas como una esponja, aprendiendo de los mayores las cosas buenas que te han enseñado. Ahora tengo un papel de liderazgo, de enseñar a los jóvenes todo aquello que he aprendido, el camino de este Familia que tanto ha conseguido y que tantas alegrías ha dado a España. Es un papel muy bonito. Es mucho más fácil con la ayuda de Sergi (Llull) y Rudy (Fernández). Es un reto que me apetece muchísimo. Todos estos años he trabajado para estas oportunidades y estoy preparado para ello.

¿Qué le transmitieron Pau y Marc Gasol que ahora quiera trasladar a los más jóvenes, a los nuevos?

Lo más importante, la diversión, el sacrificio, el trabajo, la cohesión. Unidad creo que es la palabra que lo englobaría todo. Da igual que seamos 12 en el Europeo, 15 unos días antes o los 22 que empezamos la concentración: somos una unidad. Los Gasol, Felipe (Reyes), Calderón, Juanqui (Juan Carlos Navarro) me han enseñado eso, que esto lo hacemos porque nos divierte. Venir cada verano con la Selección es para pasarlo bien y jugar junto a tus amigos y, a su vez, competir. Esa diversión se transmite en la competición y creo que es algo que hemos demostrado en esta concentración desde el primer día. Todos estamos compitiendo, todos nos estamos haciendo mejores, todos sumamos… da igual que sea en los tiros, en los partidos, en cualquier cosa: lo estamos haciendo. Es algo que no se puede perder. Es nuestro ADN.

En este torneo sí estará su hermano, Juancho, tras quedarse fuera por la negativa de Minnesota Timberwolves a dejarle participar en los Juegos, ¿cómo vivieron esta situación?

Fue dura para mí porque vivir unas Olimpiadas con tu hermano es algo único. Lamentablemente, en la Liga que jugamos (NBA) hay muchas cosas que no controlas tú, pero al menos pudo estar con nosotros acompañándonos y viviendo la experiencia. Estoy seguro de que vamos a tener más oportunidades de jugar juntos y será más divertido.

¿Se le ha subido la fama con la película ‘Garra’?

¡No! ¡Para nada! ¡Al revés! Está ya un poco harto de que la gente le llame Bo Cruz… pero es un placer. Está muy contento, es una experiencia nueva. No nos podíamos imaginar en mi familia que sería un actor de Hollywood. Es un peliculón y nos lo pasamos muy bien viéndole grabar, le acompañamos durante estos dos años, dos veranos muy duros grabando. Ves los resultados y la acogida que ha tenido la gente con ella, que le ha gustado, es algo increíble. Ni en los mejores sueños nos lo hubiéramos esperado.

Usted hace un pequeño cameo…

Sí, la parte más importante de la película son mis dos segundos. Los míos, los de Pierre (Oriola) y Felipe (Reyes). Pasamos dos días muy agradables en Mallorca de grabación. Esa escena de dos segundos fue como ocho horas de grabación. Fue muy largo, pero fue una cosa nueva. Fue una pasada.

Una experiencia que ya no le quita nadie.

Sí, y con ganas de hacer alguna cosita más si hay porque es un mundo muy divertido, muy chulo, desconocido por completo para mí.

La FIBA os pone en la sexta posición en el Power Ranking de candidatos al Eurobasket, pero en el Mundial de 2019 erais quintos y acabasteis como campeones. No hay que apostar contra ustedes.

Los rankings los hacen para tener contenido. Nosotros sabemos que no tenemos el talento de otros años, pero sí tenemos esas ganas, esa ilusión. Nosotros vamos a competir con quién sea, cada partido. Sabemos que va a ser muy difícil, pero que al final ese el ciclo de unión y esas ganas que tenemos ayuda tanto en defensa como en ataque, a salir adelante. Confiamos en nosotros mismos. Yo confió personalmente mucho en este equipo y confío en Sergio (Scariolo). Esto es un proceso: no significa que los resultados vayan a verse ya mismo. Nuestro objetivo es siempre estar en lo más alto posible. Y darlo todo. ¿Que luego la competición nos pone en nuestro sitio, arriba o abajo? Pero al menos nos vamos a vaciar en cada partido. Lo vamos a dar todo.

Va a ser un Eurobasket muy complicado con tantas estrellas NBA: Jokic, Doncic, Antetokoumpo…

Muchas selecciones tienen muchas estrellas, pero tienen que saber jugar juntas, adaptarse al baloncesto FIBA… Eso se ha visto en otros Eurobasket, Mundiales. Al final tiene que saber jugar a esto que es diferente a la de la NBA. Aquí no se necesita ser ni el más fuerte ni el más físico para dominar en Europa. Nosotros lo que si vamos a ser es los que jueguen con más corazón y más garra.

Vayamos con su temporada NBA. Nueva Orleans Pelicans, su equipo, cambia de cara con la llegada de C.J. McCollum. ¿Qué os da?

Es aire fresco. Es un aire de veteranía, experiencia, calidad. De liderazgo junto a Brandon Ingram. Empezamos la temporada bastante mal: ganamos tres de los primeros 15 partidos. Pero con la confianza y el trabajo de Willie Green, que es un entrenador espectacular y la llegada de McCollum hicimos un buen núcleo y, al final, lo que trato de transmitir aquí: nos divertíamos, éramos un grupo que salíamos a cenar todos los días… era como una familia e íbamos a ganar a cualquiera. Nos conseguimos clasificar para el play-in y los playoffs y casi dar un susto a Phoenix Suns. Es algo que no se me va a olvidar nunca y, ahora, con la llegada de Zion Williamson este verano veremos cómo nos va.

Y usted, ¿qué espera para la próxima temporada?

Temporada difícil, complicada. Vuelven muchos pívots, aunque aún habrá algún movimiento en el equipo. Y, luego, durante el curso hay que estar preparado. El año pasado se jugó de una manera y con Zion, en esta, se va a jugar de otra, y él y yo siempre hemos jugado bien juntos por resultados, por estadísticas. Nos entendemos muy bien. Ellos me han pedido que siga allí y que cuentan conmigo. Intentaré entrenar, ayudar y cuando digan mi nombre, voy a aportar siempre el 100%. A darlo todo.