El Barça espanta los fantasmas

Necesitaba ganar el Barça. Para romper la racha de derrotas, pero sobre todo para afianzarse en las cuatro primeras posiciones de la Euroliga. Ese es el primer objetivo del curso en Europa y, tras la victoria contra Estrella Roja, está un paso más cerca. Una victoria trabajada, luchada también, que los azulgranas no pudieron certificar hasta el último minuto por culpa, esencialmente, de Campazzo. El argentino fue más de medio equipo, remando cuando las cosas peor se les pusieron a los suyos. A base de triples y asistencias mantuvo a los serbios en el partido, pero no fue suficiente contra la actuación de los hombres grandes del Barça. 21 puntos para Vesely y 21 de Mirotic acabaron brindando la victoria al Barça.

A diferencia de los dos últimos partidos en Euroliga, el Barça no avasalló a su rival en el primer cuarto. Algo que puede parecer una mala noticia, pero que en realidad no lo fue tanto. La sensación que sobrevoló el Palau es que los azulgranas se guardaron algo al inicio, sobre todo en defensa, con el ánimo de llegar en plenas condiciones al final del partido. No lo iniciaron Vesely y Kalinic, habituales titulares, sino Abrines y Sanli. Dos triples del primero, por cierto, pusieron por delante a un Barça que sufrió por dentro. Tres canastas demasiado sencillas de Bentil que pudieron ser más si el jugador de Estrella Roja hubiese estado un poco más acertado. Mirotic, un punto acelerado, se sentó demasiado rápido con dos faltas. En el lado positivo, controlaron bien a Campazzo y Vildoza (18-15).

Salieron los azulgranas dormidos tras el primer cuarto, girando la ventaja Estrella Roja, con un Campazzo ya más entonado (20-25). El Barça estuvo demasiado estático, buscando la ventaja en el poste, pues tanto Vesely como Kalinic eran más fuertes y más altos que sus defensores. No tardaron demasiado los azulgranas en recuperar la delantera, con Mirotic en pista y Jokubaitis a los mandos de la nave (31-26). El cero de ocho en triples de los visitantes fue determinante, los cuatro sin fallo de Abrines también. Pero Estrella Roja empezó a anotar desde fuera y con un par de detalles más cerró la primera parte cerca del Barça (40-36).

La lluvia de triples no cesó tras el descanso (46-36) llegando el Barça a la máxima diferencia en lo que iba de partido. Ya no es una novedad que Satoransky raye a un gran nivel, pero no por ello hay que dejar de reflejarlo. Estrella Roja mantuvo el tipo gracias a Campazzo, con triples y asistencias, siendo el mejor de los visitantes. De hecho, cuando el argentino se sentó, su equipo fue otro. Por eso Ivanovic lo mantuvo tantos minutos en pista. Ni faltas le pudo hacer el Barça.

Con todo igualado (57-57) y diez minutos por jugar, 55 segundos tardó Ivanovic en volver a meter a Campazzo. Y dos minutos en parar el partido. El Barça salió decidido, ambicioso, fuerte en defensa y acertado en ataque. Un cóctel que catapultó a los azulgranas en los primeros minutos del último cuarto (68-59) de la mano de un Vesely inmenso.

Pero no estaba todo hecho. No todavía. Estrella Roja redujo la diferencia hasta el 75-73 a tres minutos para el final tras una serie de malas decisiones, y tiros, del Barça. Campazzo siguió siendo la peor pesadilla del Barça, con un triple magnífico, pero los azulgranas no dejaron escapar la victoria. Un triple de Kalinic a un minuto para el final acabó de certificarla.