A la Final Four por la vía rápida

Para un equipo como el Barça, que juega 90 partidos por temporada, ahorrarse dos en el tramo vital de la competición puede ser diferencial. Y eso intentarán hacer los azulgranas esta noche ante 15.000 almas que animarán a su rival, Zalgiris. Ganar el tercer partido consecutivo, cerrar el playoff cómodamente y despedirse, solo por 15 días, de la ciudad de Kaunas es el gran objetivo. Porque nadie duda que el Barça jugará las semifinales de la Final Four el próximo 19 de mayo.

Evidentemente todo en el deporte es posible pero parece harto complicado que Zalgiris sea capaz de remontar la eliminatoria y ganarle tres partidos consecutivos al Barça. La diferencia de potencial entre ambos, los dos duelos de la semana pasada y un hipotético quinto partido en el Palau inclinan la balanza del lado azulgrana. Pero eso no significa que el duelo de hoy vaya a ser fácil. Con un Zalgiris contra las cuerdas, el equipo lituano lo dejará todo en la pista. Y no es poco.

Las últimas dos visitas de los azulgranas a Kaunas, de hecho, se han saldado con derrota. Cualquier equipo prefiere jugar en casa pero parece que Zalgiris es uno de los que más lo acusa. En su pabellón son más físicos, más duros y sacan mucho mejores resultados. Por eso el Barça viaja con todas las precauciones posibles. Confiados en sus posibilidades, evidentemente, pero conscientes de que el partido se parecerá mucho más al segundo de la serie que al primero.

Sólo hay una baja en la expedición del Barça, Cory Higgins, que no es ninguna novedad. El norteamericano no se ha recuperado a tiempo de su lumbalgia y no ha viajado. De hecho, aún no completa los entrenamientos con el grupo. Sin fecha de retorno, todos esperan que esté recuperado para la Final Four. Su ausencia, sin embargo, ha dejado un espacio que Kuric ha sabido aprovechar a la perfección. El de Indiana está en el mejor momento del curso.

Del lado local el Barça sabe que debe tener especial cuidado con Brazdeikis y Ulanovas, los dos mejores jugadores del segundo partido. Ellos mantuvieron a flote a su equipo durante muchos minutos, pese a que no llegaron a doblegar al Barça. El excelente papel de Vesely, y los buenos minutos de Mirotic y el resto de sus compañeros, lo evitaron.