El pueblo con el nombre más largo de España: tiene 38 letras, siete palabras y está a una hora del centro de Madrid

En España, existen más de 8.000 pueblos con nombres tan largos que se hace difícil su pronunciación. Esto se debe a los diferentes aspectos migratorios del pasado, la fusión de idiomas a lo largo de su historia o la geografía que les rodea. Algunos ejemplos destacados de este tipo de pueblos son Villarcayo de Merindad de Castilla la Vieja en Burgos o Cruilles Monells y Sant Sadurní del Heura en Gerona.

El récord del mundo se lo lleva un pueblo de Gales, que cuenta con 58 caracteres y el nombre es; Llanfairpwllgwyngyllgogerychwyrndrobwllllantysiliogogogoch. Sin duda, algo muy difícil de pronunciar pero que indica el legado cultural y lingüístico que dejan estos pueblos antiguos en las nuevas generaciones. Por su parte, el premio en España se lo lleva Gargantilla del Lozoya y Pinilla de Buitrago, con 38 letras y siete palabras.

Historia de Gargantilla del Lozoya y Pinilla de Buitrago

Esta región destaca por su extensa fauna y naturaleza, gracias al río Lozoya y el Parque Nacional Sierra de Guadarrama. Cuenta con 400 habitantes y se ubica al pie de los Montes Carpetanos y la Cordillera de Somosierra. Antiguamente, este pueblo se encontraba dividido por dos localidades y ahora, se ve muy limitado por la posición de las montañas y el curso del río. Además, no solo destaca en su amplia vegetación, sino que también conserva un extenso patrimonio histórico que ha ido pasando a través de varias culturas; entre ellas, la árabe, cristiana y hebrea. En el caso de Gargantilla del Lozoya, en sus tierras se celebró la ceremonia de Juana la “Beltraneja” como heredera al Trono de Castilla. Por parte de Pinilla de Buitrago, no logró independizarse de la localidad de Duque del Infantado hasta 1753.

Fue a finales del siglo XIX, cuando ambas localidades se juntaron y así formaron el actual pueblo de Gargantilla del Lozoya y Pinilla de Buitrago. No obstante, en el pasado no eran los únicos pueblos que existían en la zona, había otros como Santiago, que desapareció dejando como legado, una ermita, algunas ruinas y una torre de espadaña. En este sentido, son tres las líneas de autobuses disponibles actualmente con las que se puede llegar a este histórico pueblo, pero solo una de ellas llega a Madrid, al Intercambiador de Plaza de Castilla, exactamente.

Rutas de senderismo y amplia naturaleza

Dada su cercanía con el Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama, las rutas de senderismo de esta zona son dignas de visitar debido a su extensa naturaleza y patrimonio histórico. La ruta más conocida es de uno 13 kilómetros que se completa en unas 4 horas y media. La ruta comienza en la plaza del Pueblo y se continúa por la Cañada del Prado Mayor, junto al arroyo. Después hay que subir hasta alcanzar un vértice donde se disfruta de una vista espectacular del Embalse de Riosequillo y la Sierra de Guadarrama. Una vez arriba, solo queda bajar por la cresta del Cerro de la Cruz, terminando en la Ruta del Robledal.

Además, también tienes oportunidad de descansar durante el trayecto en una casas de madera, ubicadas a 7-8 metros de altura, dónde se pueden escuchar los ruidos de los animales y disfrutar de las maravillosas vistas que ofrece el paisaje. Un viaje para disfrutar de la naturaleza y para disfrutar con total tranquilidad.

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