Crimen de Morata: la familia del preso asesinado pedirá a la cárcel una indemnización
En declaraciones a 20 Minutos, el abogado del preso asesinado, Rodrigo López, aseguró que la muerte de su representado “pudo haberse evitado”.
El historial delictivo de Dilawar Hussain, asesino confeso del triple crimen de Morata de Tajuña (Madrid), aún sigue en el foco. Apenas un mes de su ingreso en la prisión madrileña de Estremera, acabó con la vida de su compañero de celda, el búlgaro Ángel Asenov.
Un crimen que él mismo confesó a los funcionarios del centro penitenciario. Lo hizo a golpes, después de usar una pesa de gimnasio de 2,5 kilos que llevaba un mes desaparecida. En un informe de la causa, en el que se recogió la versión de Hussain, este mencionó que su compañero “le miraba con ánimo homosexual” cuando este estaba desnudo”. Además, también hizo referencia a las continuas discusiones que mantuvo con el búlgaro “por su falta de higiene”.
Ahora, la familia de Asenov se ha personado como acusación particular en la causa. En la misma, señaló como responsable civil subsidiario a la cárcel de Estremera. Su abogado, Rodrigo López del Cerro, concedió una entrevista a 20 Minutos en la que manifestó que el asesinato del búlgaro “se podía haber evitado”. También argumentó que la prisión “debería asumir responsabilidades”, basándose en el artículo 13 del Reglamento Penitenciario.
Indemnización solicitada
Tanto la familia como el letrado, hicieron referencia a esa pesa de gimnasio que usó Hussain para acabar con la vida de Asenov y alegaron “falta de seguridad” en el centro penitenciario. Es por ello que, según explica el citado medio, la familia, a través de López del Cerro, exigirá una indemnización que podría llegar a sufragar la prisión siempre que Hussain no pudiera hacer frente al pago de la misma.
La pesa en cuestión llevaba desaparecida del gimnasio de la prisión desde hacía un mes, algo que había sido comunicado verbalmente por el interno encargado de la sala a la dirección del centro. Según varias fuentes penitenciarias, ni la víctima ni el agresor solían visitar con frecuencia el gimnasio, por lo que nadie sospechó que ninguno pudiese tener el objeto desaparecido.
El asesinato de Asenov se produjo el pasado mes de febrero, apenas cinco días antes de que esperase un fallo del Tribunal Supremo sobre el recurso de casación que su defensa había interpuesto. Al no contar con condena firme, se encontraba como preso preventivo. Por ello, compartió módulo y celda con Hussain, asesino confeso de los hermanos residentes en Morata de Tajuña.
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