Adiós a los baches en las carreteras: el nuevo material que puede acabar para siempre con ellos
Reino Unido prueba a instalar carreteras con asfalto laminado en caliente mejorado con grafeno.
Además de ser todo un incordio en las carreteras, los baches también suponen un peligro constante para todos los vehículos. Un mal gesto durante un bache, una velocidad un poco más elevada, y las posibilidades de sufrir un accidente aumentan. En muchas ocasiones, las autoridades tratan de repararlos, pero siempre vuelven a surgir.
Sin embargo, en Reino Unido se ha comenzado a utilizar un nuevo material para construir 'carreteras antibaches’. La autoridad de carreteras del Consejo del Condado de Essex, Essex Highways, instaló una vía en 2022 con asfalto laminado en caliente mejorado con grafeno.
La mayoría de las carreteras suelen construirse con asfalto, una mezcla que lleva agregados de piedra unidos con betún. Esta última es una sustancia viscosa y pegajosa derivada del petróleo, que actúa como aglutinante para mantener unidos los áridos.
La nueva mezcla utilizada por Reino Unido es más cara que la solución común que se emplea en las carreteras, pero según la BBC, se han realizado pruebas que demuestran que es más resistente al clima y al tráfico.
“Es una batalla mantener nuestras 5.000 millas de carreteras, por lo que tenemos que encontrar formas innovadoras de hacer que duren más para los residentes”, señala Tom Cunningham, miembro del gabinete conservador de carreteras, infraestructura y transporte sostenible.
Un 10% superior en pruebas de rigidez
“Siempre buscamos maneras de mejorar los productos y cuando encontramos un aditivo de grafeno (una forma fina, resistente y flexible de carbono) que podíamos mezclar con nuestro asfalto laminado en caliente, Essex Highways aceptó ser el primero en probarlo”, indica, por otro lado, Paul Goosey, director general de Eurovia, la empresa que fabrica el material.
“Tradicionalmente, el asfalto laminado en caliente es una mezcla más fina que puede ser propensa a la formación de surcos, y el asfalto masilla de piedra es más grueso y, por lo tanto, el agua puede acumularse en los huecos y provocar baches”, señala.
Para comprobar la durabilidad del material, se instaló en un tramo de la A1016, mientras que el otro lado de la vía se construyó con el material de siempre. Los ensayos descubrieron que el producto mejorado tuvo un rendimiento 10% superior en pruebas de rigidez y un 20% en sensibilidad frente al agua.
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