Cienfuegos: “¿París? Montijo va a ser lo primero”

La simbólica pegada de carteles de Alberto Núñez Feijóo para estas elecciones fue en Extremadura, en Montijo, una localidad de 15.000 habitantes, en Badajoz. Le acompañaba Javier Cienfuegos, el candidato a alcalde del PP. Un interesante proyecto de político, pero Cienfu es mucho más conocido por su carrera como lanzador de martillo. Es el ‘Thor’ del atletismo español. Tres veces olímpico (Londres, Río y Tokio), finalista mundial y el hombre que ha cambiado la disciplina en España de manera radical. Antes de su irrupción, el récord nacional era 75,42, con él se trasladó a 79,38. Casi cuatro metros. Una transformación como la que pretende hacer en Montijo. “La última vez los resultados no fueron tan buenos para el PP aquí, ganó el PSOE y queríamos revertir la situación. Así que aquí estoy”, dice Javier, que competirá con el socialista Manuel Gómez, actual alcalde.

Con 32 años, sigue en activo como deportista al máximo nivel, entrenando a diario (“lo que la espalda me deja”), pero parte de su tiempo va destinado a la política. Subió a ese carro cuando Monago lo eligió como parlamentario extremeño. Ahora pasa a lo local. Cienfuegos aboga por estar “lejos de la crispación”: “Quiero huir de ese ambiente raruno, que parece que uno piensa en política y da la sensación que es estar de mala leche. Hay que pensar en otras políticas, en hablar con cada uno y que no te señalen por la calle porque pienses diferente. Salga alcalde o no, quiero tener siempre contacto con los portavoces de los otros grupos. El debate político debe existir, y está bien que sea apasionado, pero nunca se tienen que traspasar líneas rojas. Yo eso nunca lo haré. Hay que construir, no destruir”.

Cienfuegos extrapola esta situación a la que vive cuando viaja con la Selección española de atletismo en la que hay “muchas inquietudes políticas y sensibilidades diferentes”, aunque “algunos las expresen públicamente y otros no”: “Cuando viajamos discutimos, y tenemos charlas pero siempre desde el respeto. Se toman a cachondeo que esté metido en política, en plan bien. Pero al final, los que llevamos muchos años, por ejemplo, debatimos sanamente y no hace falta que nadie se moleste por nada. Y cuando no llegamos a ningún punto, pues pasamos a otra historia. Luego salimos a competir y todos vamos juntos y nos apoyamos como equipo”.

P: ¿Entonces cree le ha cambiado la política como persona?

R: Yo pienso y creo que soy el mismo de hace cuatro o cinco años. No he cambiado, sólo trato de mejorar las cosas, por esta vía. Me sigo llevando muy bien con todo el mundo, incluso con las personas que están en un lado contrario ideológicamente. En cuanto a la percepción de la gente es cómo con el deporte, hay quien te felicita y quien no. Hay quien sabe cómo piensas, los que te dan su apoyo, los que no te dicen nada. Pero por ser candidato a alcalde eso no siento que haya cambiado demasiado.

P: ¿Y puede seguir su vida como deportista de máximo nivel?

R: Lo único es que tengo que ajustar los horarios de los entrenamientos, que a veces lo hago a horas que no son las habituales. Hoy, por ejemplo, tenía un acto y he tenido que entrenar a las 15:00 con todo el sol, pero sarna con gusto no pica. Ahora al menos, como estoy en la política local paso más tiempo en el pueblo. Otra cosa es si soy elegido alcalde, porque ahí tienes que trabajar siempre. Después del 28 de mayo no sé cómo será mi vida, pero hasta ahora estoy trabajando normal, como atleta. Yo entreno para estar en el Mundial de Budapest de este verano. Después de la lesión fuerte de espalda que tuve, siempre tengo ahí como una espada de Damocles que me dice: ‘No te pases, que como vuelva a saltar te enteras’.

P: ¿Y los Juegos de París 2024?

R: Lo bonito sería llegar y estar en mis cuartos Juegos. Pero insisto, más allá del día 28 no veo mucho. Tengo mi agenda, la cumplo día a día y a partir de ahí ya se verá. El trabajo de carga como atleta ya está hecho para este verano, ya es sólo continuar. Si soy alcalde, el año que viene lo tendré mucho más complicado. Si algún día me toca entrenar a las 21:00 lo haré, si es a las 7 de la mañana también. Me gustaría intentarlo, pero tengo claro que Montijo va a ser lo primero. Yo soy alguien que donde se mete da el 100%. Pero también, todo tiene su principio y su fin. A mí esto me encanta, pero también cuando la espalda me duele ahora de manera diferente, ¡buf! Me asusto.

P: Pues entonces seamos realistas, ¿qué opciones tiene de salir alcalde de Montijo?

R: Lo bueno de Montijo es que es un pueblo abierto. Ha gobernado Izquierda Unida, el PSOE, el PP... A mí en ese sentido me gusta, porque es un lugar en el que si lo haces bien te premia. Ningún alcalde ha estado más de ocho años, que es lo que lleva el actual. Posibilidades de gobernar hay, pero en este arco tan amplio, que hay cinco partidos, es todo más complejo. Hay gente que vota a las siglas, pero también hay quien vota a las personas. Sabemos la problemática del pueblo y lo que queremos hacer, pero también decimos la verdad, que no se puede cambiar todo de golpe. En mi lista hay gente del partido, independiente... que se han acercado a sumar y quieren trabajar.

“La política local es completamente diferente a la regional”

Cienfuegos dio el gran salto a la política en 2019, en la Asamblea de Extremadura. Primero lo regional, pero ahora lo local, donde se siente “muy cómodo”: “La política municipal no tiene que ver nada con la política regional, que es mucho más burocracia y unos trámites muy largos. Lo local es mucho más directo. Los compañeros alcaldes me han contado que suele ser una experiencia bonita, porque arreglas los problemas de los vecinos mucho más rápido. En la política estoy conociendo mucho más mi tierra, Extremadura, de una manera diferente y eso ya no me lo quita nadie”.

P: ¿Cuál sería su primera medida en Montijo?

R: Es complicado. Las zonas verdes hay que cuidarlas, hay que estar pendiente de la suciedad en las calles, de los baches de las calzadas. Estamos creando un programa para reforzar los servicios y tratar de que sea todo metódico. Cuando un trabajador salga de un almacén sepa perfectamente lo que tienes que hacer. En esos casos, al final el trabajador se hace un lío. Queremos que todos sepan sus objetivos y la labor que desempeña. Si implantamos eso tendremos mucho ganado para tener un Montijo limpio. Pero eso es difícil, es como cuando llevas con un entrenador mucho tiempo y te cambias. Repites rutinas...

“El deporte me lo ha dado todo”

Un plusmarquista de martillo, élite mundial, que no olvida lo que le ha dado el círculo y el martillo de 7,250 kilos: “El deporte me lo ha dado todo, si estoy en la posición en la que estoy es gracias al atletismo. Cuando te haces mayor, los resultados deportivos pasan a un segundo plano. Piensas en las vivencias, viajes, las personas que conoces... Ha sido increíble”.

P: ¿Y entonces qué es más difícil, ser político o atleta de élite?

R: Todo tiene su aquel, para ser deportista de alto nivel se tiene que poner todo de cara y en la política sucede igual. Se parecen más de lo que la gente se piensa. Tienes que tener un plan y seguir los pasos, sufrir. Cuando cargas en atletismo es duro, y cuando preparas unos presupuestos también... Si quieres que las cosas salgan, hay que currárselo día a día. No puedes abandonarte.