Habrá segunda vuelta en Brasil entre Lula y Bolsonaro

Lula da Silva y su Partido de los Trabajadores se imponen en las elecciones brasileñas. Con el 48,3% del voto, el que ya fue presidente de Brasil entre 2003 y 2010 ha cumplido con las estimaciones de las encuestas y se postula como posible próximo líder del país. Jair Bolsonaro, que ha recibido el 43,3% de los votos, todavía tendrá una oportunidad para revalidar su mandato el próximo 30 de octubre en la segunda vuelta de las elecciones.

“Voy a ganar en la primera vuelta”, dijo Bolsonaro días antes de que los votantes acudiesen a las urnas, haciendo caso omiso a la ventaja de entre 10 y 15 puntos que las encuestas daban a Lula. Como ninguno de los candidatos ha cosechado más del 50% del voto, Bolsonaro y Lula volverán a verse en las urnas de forma definitiva. Ahora bien, ¿Qué le espera a Brasil en los próximos años?

A Lula le lastra el peso de su pasado. Estuvo en prisión entre 2018 y 2019 por el escándalo de corrupción ‘Lava Jato’, condena que fue anulada por la justicia. La investigación impidió a Lula presentarse a las elecciones de 2008, y ahora se presenta con un claro mensaje: “Queremos un país que viva en paz, con esperanza y que crea en el futuro”.

Esta ha sido la sexta campaña presidencial de Lula, que como candidato a vicepresidente trae a Geraldo Alckmin, miembro del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) y también su rival en el balotaje de 2006. Lo que los ha unido es la situación de “emergencia democrática” que ambos han denunciado.

Y es que Brasil presenta una serie de problemas a resolver. El clima de violencia creciente o la proliferación de armas entre civiles son algunos de ellos: en los cuatro años de Bolsonaro al frente del gobierno de Brasil, la venta de armas para particulares creció un 500%, según datos recogidos por El Mundo. El hambre es otro de las grandes crisis: según el Instituto Vox Pópuli, 33 millones de brasileños pasan hambre.