El “agujero azul” que es un cementerio de submarinistas

El “agujero azul” (Blue Hole) es un punto turístico traicionero para aquellas personas que estén dispuestas a explorarlo sin los cuidados necesarios. Es considerado como una de las maravillas naturales del mundo y calificada como una catedral submarina que atrae a cientos de submarinistas todos los años.

El Mar Rojo es un golfo del Océano Índico que conecta los continentes de África y Asia. Multitud de turistas visitan esta zona con el objetivo de tener emociones fuertes y sentir adrenalina en una de las corrientes de agua más famosas del mundo.

Misterios en sus profundidades

A pesar de su popularidad y la gran cantidad de buceadores que se encuentran, el “agujero azul” esconde muchos misterios en sus profundidades. De hecho, sumergirse en él requiere una gran atención y conocimiento para no pasar un momento desagradable que puede costarle la vida a una persona.

Este es un sumidero de 120 metros de profundidad, con un túnel desorientador de 26 metros, en el que los datos oficiales aseguran que han muerto alrededor de 40 personas pero que en realidad superan el centenar. Y es que en muchos casos, los cuerpos nunca fueron recuperados.

Origen

Se formó por la acción conjunta de los procesos de tipo karst sobre las calizas recifales que bordean la península del Sinaí en la zona del golfo de Aqaba. Su origen se remonta a la última glaciación, cuando el nivel del mar estaba varias decenas de metros por debajo del nivel actual.

La leyenda del lugar se remonta a 1977, año en que los cuerpos abrazados de dos buzos irlandeses fueron rescatados de lugar. A partir de ese momento, muchos pescadores beduinos locales comenzaron a pensar que el lugar está embrujado. En la actualidad, se encuentra inundado por agua marina y su nombre proviene de su localización a pocos kilómetros de la ciudad egipcia de Dahab.

Después de la muerte de estos dos jóvenes irlandeses se colocó una placa en las proximidades de este lugar, siendo la primera de muchas muertes que llegarían a posteriori y que aportarían a la zona ese aspecto de extraño cementerio en la zona.

“Cementerio de los buceadores”

Considerado el “cementerio de los buceadores”, quiénes conocen el tema se refieren al agujero como una estructura desorientadora. Una de las principales consecuencias al adentrarse es sufrir la narcosis, esto es, una especie de borrachera que los buceadores lo asemejan a perder la noción de lo que es arriba y abajo, además de condicionar a la persona para respirar ciertos gases a alta presión.

Según el relato de profesionales en el tema, las aguas en ese pozo son muy traicioneras. Al sumergirse, la vista identifica una luz, que puede compararse con la del sol y la analogía de salir a a superficie. Pero, en realidad, no es la superficie del Océano sino que el cuerpo inicia un proceso descendente hacia lo más profundo, que puede conllevar un final trágico. A este proceso se le conoce como “el éxtasis de las profundidades”.