Cómo ahorrar energía en casa: los hábitos que más consumen

La puesta en marcha de la llamada ‘excepción ibérica’ ha ayudado a reducir la factura de la luz en un contexto de alza del precio de la energía. Sin embargo, también hay gestos que pueden ayudar a consumir menos electricidad.

Más allá de los típicas recomendaciones, como apagar la luz cada vez que se abandona una habitación, lo más importante es identificar los hábitos que más energía consumen en el hogar.

Una de esas acciones es la climatización de la vivienda. Para que sea eficiente, es clave que la casa cuente con un buen aislamiento térmico. A ello, aunque son elementos simples, pueden ayudar ventanas que cierren correctamente o unas buenas cortinas.

En ese sentido, Enrique García, miembro de la Organización de Consumidores y Usuarios de España (OCU), destaca, en declaraciones a BBC Mundo, que “en un hogar medio en España, y en otros países parecidos en cuanto a desarrollo, aproximadamente el 45%-47% del consumo eléctrico se va en la climatización y la luz, sobre todo, en la climatización”.

Ajustar la temperatura de forma adecuada

García precisa que “la temperatura de confort no debe superar en invierno los 23 grados. Una temperatura entre 21 y 23 grados es una temperatura adecuada. Cada grado puede suponer un incremento del coste, dependiendo del equipamiento de cada casa, de entre un 7% y un 10%, más cerca del 7%”, detalla el experto.

Por el contrario, en verano, desde la OCU aconsejan encender el aire acondicionado antes de que el calor se concentre en la casa, para así reducir el consumo del aparato para situar la vivienda en la temperatura deseada.

Precisamente, respecto a la temperatura que debe tener el hogar en el periodo estival, la Organización de Consumidores y Usuarios de España recomienda colocarla alrededor de ocho grados menos que la temperatura que se registre en el exterior.

Ahorrar en los electrodomésticos

Más allá de la climatización, también es importante ahorrar en el uso de los electrodomésticos, que “se llevan aproximadamente el 55% del consumo”, aclara Enrique García. En este aspecto, es esencial “comprar electrodomésticos con un alto nivel de eficiencia energética”.

De esta forma, en caso de tener que sustituir alguno de los electrodomésticos del hogar, es preferible optar por aquellos que cuenten con las etiquetas energéticas más eficientes, como las A+, A++ o A+++. Pese a su mayor precio, a largo plazo son más rentables porque gastan menos.

Seguir este consejo es especialmente recomendable en el caso del frigorífico, “el electrodoméstico que más consume al estar más tiempo enchufado”, subraya el miembro de la OCU.