Alcaraz se crece: “Me veo capaz de ganar el torneo”

Carlos Alcaraz acudió a la rueda de prensa posterior a su victoria contra Holger Rune en cuartos de final de Wimbledon, ataviado de nuevo con su ya famoso gorro Nike de pescador, que está muy de moda en el torneo. Con la amplia sonrisa que le provocaba la satisfacción del deber bien cumplido, el murciano no tuvo ningún problema a la hora de reconocer que se ve “capaz de ganar el torneo”.

“Todo el mundo sabe que Djokovic es el principal candidato, está clarísimo, pero la sensación que tengo ahora mismo es que puedo. Tengo la confianza, un gran nivel, y diría que sí, que me siento con opciones de mantenerlo”, explicó Charly, que contestó con clase cuando le preguntaron que opinaba sobre que Rune hubiera dicho que se había levantado mal la mañana antes del partido. “Cada uno puede decir lo que quiera. Quizá sea verdad. Pero un Slam son dos semanas. Nunca te vas a despertar perfecto, nunca vas a sentirte perfecto, y con esas sensaciones tienes que lidiar, tienes que jugar y dar tu mejor versión. Estoy seguro de que los grandes tenistas que han ganado muchísimos torneos, no se han levantado o no se han sentido al cien por cien siempre”.

Con esa madurez, impropia quizá de sus 20 años, afrontará la semifinal contra Daniil Medvedev, un encuentro en el que espera poder aplicar la experiencia del pasado Roland Garros, cuando los nervios y la tensión le provocaron calambres ante Djokovic en la penúltima ronda. “Al final son cosas que hay que vivir y aprender de ellas. He aprendido bastante de lo que hice mal y sé lo que puedo mejorar. Tengo una oportunidad de poder mejorar todo lo que hice mal en Roland Garros. Probar otra rutina antes de las semifinales junto con mi equipo, quizá hablar más. Y la verdad es que hay muchísimas maneras en las que puedo hacerlo mejor que allí. El viernes lo vamos a hacer”.

Valentía y estilo

Estos días, en el All England Club, está demostrando que atacar en las juegos importantes, y lo explica: “Siempre he dicho esa es la diferencia entre los muy buenos y los buenos. En los momentos clave, es donde uno tiene que sacar el buen juego, la valentía que tiene. Para mí es la diferencia. Lo que intento es ser valiente, fiel a mi estilo e ir a por todas. Por eso, en esos instantes, doy un plus de nivel. Y es verdad que estoy llegando a un rendimiento mayor, que igual otro jugador no logra aumentar”.