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Iga Swiatek
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Cristina Bucsa
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TENIS | OPEN DE AUSTRALIA

Swiatek apabulla a Bucsa

La polaca, número uno del mundo, no se apiada de la española, que solo gana un juego en la despedida individual de su mejor torneo.

Melbourne
HANNAH MCKAYREUTERS

Cristina Bucsa no había jugado nunca ante una top-10 ni una pista tan grande como la Margaret Court Arena. Todo era demasiado nuevo para ella. Y enfrente tenía a la mejor enemiga posible, Iga Swiatek. La número uno del mundo no es conocida precisamente por apiadarse de sus rivales, que se lo pregunten a Karolina Pliskova, que se llevó dos roscos ante la polaca en la final del WTA 1.000 de Roma de 2021. La española fue víctima de la ambición de la ganadora de tres Grand Slams (Roland Garros 2020 y 2022, y US Open 2022), que solo la dejó ganar un juego, el último con su saque: 6-0 y 6-1 en 55 minutos. Lanzada a por el título, Swiatek se enfrentará el domingo en octavos a la kazaja Elena Rybakina.

“Este partido me ha enseñado que tengo un margen de mejora brutal. Después de jugar con Bianca (Andreescu), al día siguiente fui a entrenar pero Bianca me había machacado. Hoy se han notado los tres partidos de la ‘qualy’ y los otros dos”, explicó Bucsa.

Se acabó la aventura individual de Cristina, que este mismo viernes jugó en dobles con la japonesa Makoto Nimomiya contra la estadounidense Sofia Kenin y la kazaja Yulia Putintseva, a las que vencieron por 6-2 y 6-3. La cántabra se fue de la pista con la sonrisa que le gusta poner cuando juega al tenis, como ella dice. Venía de eliminar a la campeona del US Open 2019, Bianca Andreescu y su periplo oceánico la ha reportado un buen beneficio en el ranking. De momento es la 86ª del mundo y tiene asegurado el top-100 pase lo que pase en el resto del torneo.

Contra Swiatek, poco pudo hacer Bucsa, muy nerviosa en el arranque (14-1 inicial en puntos y sólo seis ganados por ella en el primer set), quizá abrumada por el escenario (“La pista tan grande me ha descolocado. También en el partido contra Bianca lo veía todo grande”, reconoció), no tanto por las expectativas, que no la afectan a sus 25 años. Iga hizo su tenis y la pasó por encima, hasta que levantó el pie del acelerador en el penúltimo juego del encuentro, un alivió para su rival, que se hubiera ido marcada y con un sitio entre los peores resultados de la historia del Slam aussie.

Aspectos a mejorar

Tiene potencial para competir con buenas rivales si mejora, sobre todo, físicamente, porque la presión no puede con ella. “Tengo que mejorar la intensidad, porque ella le da muchísima a la bola. Eso, por ejemplo, lo hice en el Abierto de Estados Unidos y aquí bajé porque físicamente no estuve tan bien”, admitió. A partir de ahora podrá entrar en más torneos y acumular horas en pista y experiencia. “Están Lyon, Abu Dhabi Doha, Dubai. Con mi nuevo ranking tendré más posibilidades de entrar a los torneos”. Es la su hoja de ruta de una tenista que florece.

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