Hasta la tierra de París
La lucha por los títulos de Grand Slam continuará para Djokovic y Nadal en Roland Garros. El serbio quiere más: “Aún hay mucho fuego dentro de mí”.
Novak Djokovic festeja pletórico su décimo título en el Open de Australia, el 22º de Grand Slam con el que iguala el récord masculino que Rafa Nadal tenía en solitario hasta el pasado domingo. El español tuvo que verlo desde casa, donde su recupera de su última lesión (rotura de grado 2 en el psoas ilíaco de la pierna izquierda). No podrá jugar, como mínimo, hasta marzo.
Son las dos caras de la moneda de un histórico mano a mano que, en principio, continuará en Roland Garros (28 de mayo al 11 de junio). Nadal tiene señaladas en rojo esas dos semanas, y tratará de prepararse bien en la campaña de tierra que empezará, si todo va bien para él, en Montecarlo (9 al 16 de abril). En su calendario estarían después Barcelona, Madrid y Roma, antes del major francés. La duda es si decidirá competir antes, en la gira estadounidense de pista dura, que pasará por Indian Wells y Miami.
Djokovic, por su parte, tiene previsto volver a competir en Dubái (27 de febrero al 5 de marzo), un ATP 500 al que se había apuntado Nadal, que también iba a jugar el 5 de marzo una exhibición en Las Vegas contra Carlos Alcaraz. Esas dos citas ya no están en sus planes. El balcánico, que no acudirá a los citados Masters 1.000 americanos, porque aún no puede entrar en Estados Unidos sin la pauta completa de vacunación, encarará después el regreso a la arcilla, en Montecarlo, Madrid y, probablemente, Roma, para llegar lo mejor posible a Roland Garros, donde tratará de consumar el sorpasso con su 23º trofeo de Slam.
Las eternas necesidad de reivindicarse
“Creo que aún hay mucho fuego dentro de mí, que arde por la pasión que siento por este deporte y por la competición. Y pienso que eso es lo que me permite continuar empujándome hasta el límite”, dijo Djokovic este lunes en los jardines de la Casa del Gobernador de Melbourne, después de la sesión fotográfica reservada a los campeones del Open de Australia. “Los entrenamientos, muy repetitivos, a veces no son muy interesantes, pero sé que siempre hay un objetivo mayor, estrellas que me guían. Y este trofeo es una de ellas. Es algo por lo que siempre me esforzaré”, añadió antes de reconocer que en realidad no tiene claro cuándo volverá a jugar, por la lesión que arrastra en el muslo izquierdo: “No estoy seguro. Voy a hacerme pruebas médicas en los próximos días. Estoy inscrito en Dubái y espero volver a las pistas en unas semanas”. Sobre las dudas que generaron sus molestias en algunos medios, asegura que dará “más detalles” y publicará “fotos” en sus redes sociales “con todo lo que ha pasado”. “No quiero que suene patético. Gané el trofeo. Pero hace dos años pasó algo similar y la gente sigue dudando. Si hubiera sido algo pequeño podría haberme entrenado en los días de descanso y no pude. Nunca había vivido una situación así”.
El genio de Belgrado bromeó al contar cómo había celebrado su triunfo: “Con la prensa y el control antidopaje. En realidad no he tenido todavía la oportunidad tanto como me hubiera gustado. Espero poder hacerlo en Europa”.