Swiatek-Rybakina, duelo de altos vuelos en semifinales

Iga Swiatek, ganadora de seis Grand Slams, y Elena Rybakina, campeona en Wimbledon 2022, vivirán el domingo (a partir de las 19:00, Tennis Channel) el décimo capítulo de una rivalidad que domina la polaca por 5-4, con triunfos en sus tres últimos enfrentamientos. Esta vez pugnarán en las semifinales del WTA 1.000 de Cincinnati después de la victoria de Swiatek contra Anna Kalinskaya (6-3 y 6-4 en 94 minutos) y de Rybakina ante Aryna Sabalenka (6-1 y 6-4 en 75).

Swiatek se vengó de la derrota que encajó ante la rusa el año pasado en las semifinales de Dubái. “Este partido ha sido muy diferente. Estoy contenta por haber sido tan proactiva desde el principio, solo haciendo mi tenis. No fue fácil, pero estuve sólida y le puse mucha intensidad para meter presión”, dijo Iga, que iguala su mejor resultado en uno de los dos únicos WTA 1.000 en los que no ha alcanzado aún la final (el otro es el de Canadá). Esta es su cuarta semifinal de la temporada en la categoría y la 21ª de su carrera. Con 24 años, es la tenista más joven que logra acceder a la penúltima ronda de Cincinnati tres veces consecutivas en la Era Open.

El estado físico de Kalinskaya, con molestias en el hombro derecho y en el gemelo izquierdo (se lo vendaron después de los tres primeros juegos del partido), facilitó la tarea de Swiatek, que ganó muchos puntos con primeros servicios (el 82,8%). Al resto, hizo tres breaks que le permitieron controlar la situación y frenar el intento de remontada de la moscovita en el segundo set. Al final del encuentro, improvisó una reflexión sobre el cambio climático al explicar cómo combatía el calor: “No hay secretos, solo bebo, pero agua (risas). Honestamente, creo que nos tenemos que acostumbrar a cómo está cambiando el mundo y esto cada vez es peor y peor”.

Rybakina, por la vía rápida

Rybakina, que vive un buen momento de forma —9-2 en la gira norteamericana con las semifinales de Washington y de Montreal, que perdió frente a las eventuales campeonas, Leylah Fernández y Victoria Mboko—, completó una actuación muy sólida ante Sabalenka, a quien superó con inesperada facilidad. La kazaja, de 26 años y 10ª del mundo, no dejó que la número uno del mundo se metiera en el partido salvando, principalmente con buenos saques (11 aces), las cuatro opciones de break que tuvo la bielorrusa. Así cerró su séptimo triunfo ante una líder del ranking. La más reciente había sido, precisamente, ante Aryna, en las WTA Finals 2024.

“Estoy muy feliz de estar en semifinales. Fue un partido duro (mintió), pero jugué realmente bien así que espero poder continuar así en el próximo partido. El saque ha sido clave, porque las dos somos grandes pegadoras. Y en esta superficie dependes mucho de eso. Lo hice bien y tenía una ventaja que me ayudó a cerrar la victoria. También lo hice bien de fondo, con mucha intensidad”, expresó Rybakina, que su 11ª semifinal de WTA 1.000, tercera en 2025 tras las de Dubái y Montreal. En Cincinnati nunca había llegado tan lejos y aún podría mejorar su tope. “Iga es una gran jugadora, así que será un encuentro complicado. Trataré de recuperarme y estar centrada en mí misma. Espero que pueda mostrar un buen tenis”, avanzó sobre su próxima cita.

Kudermetova, contra Paolini

En el tercer duelo de cuartos del cuadro femenino de Cincinnati, Veronika Kudermetova pasó por encima de Varvara Gracheva (6-1 y 6-2 en 64 minutos) y se enfrentará en su primera semifinal en el torneo, tercera en un WTA 1.000 (tras las de Madrid y Roma en 2023), a Jasmine Paolini, que remontó para eliminar a la favorita estadounidense Coco Gauff (2-6, 6-4 y 6-3 en 2h03).

La rusa de 28 años y 36ª del mundo fue muy superior a la francesa de 25 y 103ª, que provenía de la previa. Veronika había vencido por primera vez en su carrera a dos top-20 (Bencic y Tauson) en un mismo torneo y tenía una marca de 4-1 ante rivales de fuera del top-100 (5-1 ahora). Deja el cara a cara contra Gracheva en un 3-0 a su favor.

En el último partido del día, Gauff volvió a pasarlo mal por culpa del saque. La número dos del mundo cometió 16 dobles faltas para un total de 62 errores no forzados. Así, sus posibilidades de éxito ante una rival con sentido táctico, como Paolini, mermaron. La italiana supo reaccionar tras perder el primer set y también cuando la americana trató de remontar el 2-0 con el que se inició el tercero. Eso a pesar de torcerse el tobillo derecho en un desplazamiento lateral.

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