La crisis de Swiatek no deja de crecer: fuera del top-3 mundial
La polaca, a punto de cumplir un año sin ganar un solo título, es derrotada por Danielle Collins en tercera ronda de Roma y saldrá del top-3 mundial por primera vez en más de tres años.
Algo pasa con Iga Swiatek, y cada vez es más evidente que la polaca, ganadora de cinco Grand Slams, atraviesa una importante crisis. De resultados, juego, confianza, sensaciones, incluso de felicidad sobre pista. Llámenlo como quieran. La número dos del ranking mundial, que en poco más de una semana saldrá del top-3, a punto de cumplir un año sin ganar un solo título en el circuito (fue Roland Garros 2024), se pegó un nuevo batacazo este sábado al ser eliminada del WTA 1.000 de Roma en tercera ronda por Danielle Collins (6-1 y 7-5 en 1h44), y por primera vez desde 2020 llegará a su major fetiche sin éxitos en la gira de tierra. Collins, de 31 años y 35ª mundial, que reaparecía en el Foro Itálico tras un mes en el dique seco, se medirá en octavos de final con Elina Svitolina.
A pesar de su sequía de títulos en lo que va de curso, a Swiatek había que reconocerle que en este 2025 estaba manteniendo cierta regularidad, y es que en ninguno de los siete torneos que había disputado había caído antes de los cuartos de final (tampoco había alcanzado una sola final). En Roma, sin embargo, donde la de Varsovia ha sido campeona en tres ocasiones, la temprana derrota de Swiatek supone el punto final a una racha de 26 WTA 1.000 seguidos en los que llegaba, como mínimo, a los octavos de final (no fallaba desde Cincinnati 2021). Ya van 336 días, y sumando, desde el único trofeo levantado por Iga, que obviamente tampoco suma alegrías desde su positivo en trimetazidina en agosto del año pasado y su posterior sanción de un mes en diciembre (no se perdió ningún torneo).
Este palo, además, trae consigo una importante consecuencia: pierde 935 de los 1.000 puntos que defendía del curso pasado, y, por tanto, saldrá del top-3 mundial en la próxima actualización del ranking. Es virtualmente cuarta en la clasificación, superada ya por Coco Gauff y Jessica Pegula, segunda y tercera, respectivamente, e incluso un título de Jasmine Paolini (ya en octavos después de apear a Ons Jabeur por 6-4 y 6-3) haría que cayese al quinto puesto de un ranking en el que, para encontrar la última vez en la que Swiatek no era miembro del top-3 mundial, hay que retrotraerse hasta el 7 de marzo de 2022, hace más de tres años. A un mundo, casi 5.000 puntos, está del número uno de Aryna Sabalenka, y, encima, en Roland Garros (del 25 de mayo al 7 de junio) defiende los 2.000 tantos de campeona.
“No estoy haciendo las cosas bien”
“Sí, definitivamente creo que hay algunas cosas que destacan”, respondió con sinceridad Collins cuando fue preguntada sobre si había visto una versión de Swiatek más vulnerable. La estadounidense, que hasta este domingo había perdido siete de los ocho enfrentamientos entre ambas, dominó el primer set y maniató a una Iga, en efecto, mucho más vulnerable que en el pasado. Falla más de lo habitual, su defensa ya no es tan aguerrida y no intimida como antes. Le brindó a Collins la primera victoria de su carrera ante una top-5 sobre tierra batida, y la norteamericana, a los 31 años, se convirtió en la jugadora de mayor edad que vence a una rival del top-2 en el WTA 1.000 de Roma en las cuatro últimas décadas. Estado de emergencia declarado para Swiatek.
Horas más tarde de su derrota, Swiatek reconoció ante los medios que atraviesa una crisis. “No estoy haciendo las cosas bien”, resumió la campeona en Roma en 2021, 2022 y 2024. “Sin duda no está siendo fácil. Seguro que estoy haciendo algo mal. Así que necesito recomponerme y cambiar algunas cosas. El equipo me dio algunos consejos. Intentaré hacerlo”, explicó la de Varsovia, que habló sobre la necesidad de un cambio en su mentalidad. “Creo que simplemente no estuve presente para luchar y competir. Me centré en mis errores. Es mi error y no estoy haciendo las cosas bien. Así que sí, el foco está en las cosas equivocadas desde mi lado y trataré de cambiar eso. Simplemente, intentaré, como dije, cambiar un poco mi mentalidad, reorganizarme y concentrarme en el trabajo diario”, sentenció Iga.
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