Kyrgios llega a Turín la noche del domingo y pierde el lunes: “Mi preparación no ha sido la ideal”
El australiano llegó con suspense, tras pasar unos días en México, y cayó con Kokkinakis contra Koolhof y Skupski. “Nosotros no necesitamos perder el tiempo entrenando”, justifica.
Nick Kyrgios, genio y figura, no deja a nadie indiferente con su manera de entender el deporte y la vida. El australiano inició una etapa de cierta madurez en la campaña de hierba, el pasado mes de junio, que le llevó a disputar la final de Wimbledon, que perdió contra Novak Djokovic. Sin dejar del todo de lado sus extravagancias, tanto en la pista (multas) como fuera de ella (declaraciones en ruedas de prensa y redes sociales), el australiano parecía dispuesto a llevar un día a día más ordenado de entrenamientos, dieta y descanso.
Pero el domingo llegó el domingo sobre las 23:00 a Turín, donde este lunes tenía que jugar un partido de dobles con su compatriota Thanasi Kokkinakis en las ATP Finals. Les esperaba la mejor pareja del mundo, la formada por el neerlandés Wesley Koolhof y el británico Neil Skupski. Y claro, perdieron, aunque en un partido muy igualado que empezaron ganando: 6-7 (3)6-4 y 10-5 en 1h30.
Después en rueda de prensa, Kyrgios reconoció que su planificación para encarar la Copa de Maestros no había sido la más adecuada. “Mi preparación no ha sido la ideal”. Aunque acto seguido, echó por tierra su disculpa con una frase lapidaria: “Pero nosotros no necesitamos perder el tiempo entrenando”. También advirtió que sus “niveles de energía no son muy altos ahora mismo”. Lo dicho, genio y figura.