Otra obra de arte de David Alonso
El colombiano de Madrid arrancó sexto la última vuelta y se quitó cinco rivales para recibir el banderazo antes que nadie, con 0.041 de ventaja sobre Holgado.
A este paso, van a tener que habilitar una sala en el Museo del Prado para exponer las obras de arte que dibuja con cada victoria que consigue David Alonso. El colombiano de Madrid ya impresionó el año pasado en su primera temporada en Moto3 con cuatro victorias, a cual más bonita, y en la carrera que ha abierto la temporada 2024, la del GP de Qatar, se ha inventado otra obra de arte...
El pupilo de Aspar del CFMoto comenzó la última vuelta en sesxta posición y se las apañó para quitarse de encima a cinco rivales y batir en la línea de meta a Daniel Holgado, que lideró gran parte de la prueba, por 41 milésimas. Si hay una categoría en la que la posición de parrilla importa menos para la carrera ésa es el de Moto3, con lo que el octavo puesto inicial de Alonso no le quitaba ninguna posibilidad de victoria y desde el primer instante estuvo en las primeras posiciones.
Le facilitó las cosas a David y al resto de pilotos que acabaron en el podio que se fueran al suelo al inicio de la tercera vuelta Rueda y Ortolá. Al sevillano se le fue la rueda trasera en el primer viraje y tocó a Ortolá, con lo que los dos se cayeron. Fue un lance de mala suerte para dos pilotos que tenían un ritmo extraordinario, algo que demostró después Ortolá, porque reanudó la marcha tras caerse y, con el freno y el manillar doblado, pudo remontar del 24º al 9º final que le da siete puntitos. A Rueda, por su parte, se le acabó la carrera en ese punto.
No fue la única caída dolorosa, porque Fernández y Pérez se fueron al suelo en la última vuelta peleando por unas posiciones de podio que cerró Furusato, muy combativo durante toda la carrera y testigo de excepción la bonita y precisa pasada que Alonso le hizo a Holgado en la última curva de la última vuelta, donde más gusta a un piloto. Queda toda la temporada por delante, pero a ver quién frena a un piloto que, entre otros, tiene encandilado a un tal Marc Márquez. Normal, entre extraterrestres se distinguen rápido y tiene pinta que este chaval de 17 años también lo es... Tiempo al tiempo.