MotoGP

Márquez: cuentas pendientes con Austria

El español pondrá fin a las vacaciones enfrentándose a uno de los circuitos de su lista negra: nunca ha ganado en el Red Bull Ring y tener la Ducati oficial podría acabar con esa maldición.

RONNY HARTMANN
Gallega en Madrid. Graduada en Periodismo por la Universidad Complutense. Aprendió en la SER y aterrizó en el AS en 2020. El olor a gasolina y los motores le acompañan desde pequeña y, aunque no sabe lo que es ir a 300km/h, le gusta contarlo. Le encontrarás recorriendo el mundo de circuito en circuito y con la pasión de descubrir nuevas historias.
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Al Mundial de MotoGP se le acaban las vacaciones de verano y ya se cuentan los escasos días que quedan para volver a escuchar el rugido de los motores. El paddock del campeonato sigue recorriendo Europa y aterriza este fin de semana, del 15 al 17 de agosto, en Spielberg para celebrar el GP de Austria. El regreso a uno de los ya míticos trazados del calendario mundialista. Un circuito que, además, está marcado en negro para Marc Márquez. Y es que el español se enfrenta a un reto de fuego: seguir alargando la racha de victorias consecutivas en lo que va de temporada. ¿Problema? El escenario. El piloto oficial de Ducati jamás ha ganado en el Red Bull Ring, lo cual, amenaza seriamente un récord de cinco triunfos consecutivos con dos marcas diferentes que solo comparte con Valentino Rossi. Precisamente al piloto que quiere igualar con un noveno Mundial este mismo año.

Pero para seguir dando un golpe a la clasificación general, todo pasa por ganar en Austria. Y ahí está el reto. Desde que este trazado regresó a MotoGP en 2016, Márquez no ha logrado subirse a lo más alto del podio. Lo rozó en varias ocasiones, pero, precisamente, siempre fue una Ducati del equipo oficial la se metía por el medio para entorpecer su triunfo. En 2017 y 2019 protagonizó unos duelos muy intensos con Andrea Dovizioso y, en 2018, el rival pasó a ser Jorge Lorenzo. Siempre una moto italiana frente a la Honda con la que dominaba el español. En las tres ocasiones, Márquez terminó segundo. Rozando la victoria. Acariciando el éxito con las yemas de sus dedos y dejando un sabor agridulce que todavía no se ha podido sacar. De hecho, en 2019 perdió la victoria en la última curva, cuando el italiano le pasó para ganar por solo 213 milésimas.

Y es que Spielberg es el escenario que más se le resiste, el que más ocasiones ha visitado. Los dos otros que forman parte de su lista negra son Portimao (Portugal) y Mandalika (Indonesia). Dos trazados que están por llegar en esta segunda parte de la temporada y a los que Marc ya podría llegar como campeón del mundo si sigue en esta línea de dominio absoluto. Lo cual, se traduciría en correr sin presión. Un punto a favor.

Marc Márquez y Andrea Dovizioso luchan por la victoria en el GP de Austria de 2019, que acabó con victoria del italiano.LISI NIESNER

Bagnaia, el hombre a batir

Aunque si quiere asestar ese golpe al campeonato y saldar esta deuda pendiente con el Red Bull Ring, Marc Márquez tendrá que batir a su compañero de equipo. Es cierto que lo viene haciendo durante todo lo que llevamos de curso, pero es que Pecco Bagnaia es uno de los grandes favoritos en un circuito en el que ha dominado los últimos tres años. Y de manera consecutiva. Bien es cierto que el italiano no llega en su mejor momento, con una Ducati a la que no acaba de adaptarse y con mucho que poner en orden. Al menos llegará con las pilas recargadas para seguir trabajando en busca de soluciones y con el deseo de recortar distancias con un liderato que ve desde la tercera posición, a 168 puntos de distancia. El objetivo es ambicioso.

Sobre todo teniendo en cuenta que Marc Márquez tiene entre sus manos la mejor moto de la parrilla. No será la primera vez que el español corra en Austria con una Ducati, pero sí con la oficial. Quizás la máquina que necesitaba para romper este maleficio que arrastra desde los tiempos de Honda, cuando la moto no podía luchar en las rectas con las Desmosedici. Será una nueva oportunidad, porque el pasado 2024 la suerte no estuvo de su lado. Pese a que el sábado consiguió un tercer puesto en la parrilla de salida, se quedó fuera del esprint por una caída y fue cuarto el domingo. Y pudo ganar, pero en la carrera dominical, una pésima salida, provocada por un problema con el holeshot, le obligó a remontar. El español, entonces en Gresini, se fue largo en la escapatoria de la primera curva y pasó de ser tercero a décimo cuarto.

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En lo que va de año, Márquez ha logrado once de doce victorias en la esprint, ocho triunfos los domingos, ocho dobletes (cinco consecutivos), siete poles y siete vueltas rápidas. Además, ha conseguido el 85% de los puntos a repartir en la primera mitad del año y cuenta con 120 puntos de ventaja sobre su hermano, Álex Márquez, en la clasificación general. Un 2015 de récord. Este es el año de Marc Márquez y ni siquiera Austria se podrá resistir.

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