KTM no atiende a las presiones y zanja su futuro en MotoGP
A pesar de que los acreedores están haciendo fuerza para que los austriacos abandonen el Mundial, el equipo no cede: “Seguiremos compitiendo”.
Lejos de mejorar con el paso del tiempo, la situación de KTM y su futuro en MotoGP presenta cada vez más sombras. Desde que se hizo oficial la crisis financiera por la que atraviesa el fabricante austriaco, siempre existió una máxima: que el proyecto mundialista no se vería afectado. Sobre el papel, la promesa se cumplía con unas jornadas privadas de test en Jerez en las que estuvieron presentes Pol Espargaró y Dani Pedrosa, bajo la atenta mirada de un Maverick Viñales que se estrenará en 2025 junto a los de Mattighofen. Por su parte, ante la preocupación, Pedro Acosta se desplazó hasta la sede austriaca junto a su representante y tras la visita apostaron por “creer y confiar” en un proyecto, sobre el que regresan las presiones.
Los acreedores están presionando para que KTM abandone el Mundial de MotoGP en todas sus categorías. Durante el día de ayer el representante de los acreedores, reunidos bajo el paraguas de la Asociación de Acreedores de los Alpes (AKV), incluyeron en la lista de sugerencias la retirada del proyecto mundialista e hicieron saltar las alarmas en torno a un futuro, en el que desde Mattighofen no están dispuestos a ceder. Porque la marca austriaca asegura que seguirán en activo: “Hoy es un día importante para KTM. Con la confirmación de nuestro proceso de reestructuración. Este hito asegura nuestro plan para seguir adelante, y estamos orgullosos de confirmar que el deporte del motor sigue siendo una parte integral de este plan de reestructuración. KTM mantiene su firme compromiso con el deporte del motor. Repetimos nuestra declaración para 2025: ¡seguiremos compitiendo en MotoGP!”.
La ‘Cara B’ de la moneda llega desde los acreedores, que tienen a MotoGP en el punto de mira. “Para reducir costes, está prevista la salida de MotoGP Moto3/Moto2″, se leía en la nota, como sugerencia que dejaba en segundo plano todas las demás. Ni siquiera la inyección de capital que recibió KTM (cercana a los 700 millones de euros) ha hecho que desde Austria se asuma la continuidad del proyecto competitivo. Pero en el seno de Mattighofen todavía hay quien tiene claro la necesidad de seguir en activo en el Mundial: “Las carreras son el escenario donde mostramos nuestra marca, nuestra tecnología y nuestra pasión por las carreras”.
En KTM están aguantando el chaparrón como pueden, especialmente después de haber descubierto cuáles son las exigencias del representante de los acreedores. Ni siquiera las cifras (11 títulos, 246 podios y 150 victorias) de este 2024 en las distintas disciplinas de élite en las que han participado convencen a la parte de AKV. Pero la empresa austriaca tiene claro que no va a sucumbir a las presiones. “No vamos a soltar el acelerador”, aseguran desde Mattighofen y ellos tienen la última palabra.