Ducati tiene reservas
Binder ve superior a la Desmosedici, a pesar de que peleó con Martín y Bagnaia en Qatar: “Tienen un tanto por ciento más para cuando quieren usarlo”.
Es demasiado pronto para sacar conclusiones sobre qué será esta temporada 2024 de MotoGP, pero que en el top-7 de la carrera en Losail apareciesen seis Desmosedici no es casualidad. Ducati mantiene la tónica que instauró en los test y con refuerzos como Márquez, cada vez son más las posibilidades de que la moto italiana cope las primeras posiciones. Cada vez es más complicado encontrar las excepciones en esta regla de superioridad que presenta la casa de Borgo Panigale en la parrilla, pero al menos en los primeros cursos del año ha sido la RC16 de KTM quien más ha amenazado un dominio que si es fiel a los antecedentes, dejará pocas oportunidades para los demás.
El año pasado fueron cuatro las victorias que no se sumaron en el marcador de los de Bolonia. Rins (con la Honda), Aleix Espargaró (dos veces con Aprilia) y Maverick (en otra ocasión con la RS-GP) fueron quienes hicieron imposible un año perfecto para Ducati, pero en este comienzo de curso ha sido Binder quien le ha complicado las cosas a los pilotos de la fábrica italiana. Dos segundas posiciones entre el esprint y la carrera del domingo debería ser motivo de celebración en el seno de KTM, pero después de dos años sin sumar triunfos a su marcador, el sudafricano sigue persiguiendo esos 25 puntos que se le volvieron a escapar en la carrera larga.
¿Puede Binder poner fin a esa racha en este 2024? “Creo que sucederá igual que el año pasado. Estamos súper cerca, pero aún no hemos demostrado que podemos hacerlo”. La diferencia entre el sudafricano y el ganador fue mínimamente superior al segundo, pero Brad no considera que esa brecha sea real: “En mi caso siento que estoy empujando al 100% todo el tiempo. Sin embargo siento que (en Ducati) tienen un tanto por ciento más en el bolsillo para cuando quieran usarlo”. ¿Qué quiere decir eso? Que la distancia con Bagnaia podría haber sido superior si el italiano hubiese querido empujar.
La sensación en KTM es que Pecco controló el ritmo pero la buena noticia es que en igualdad de condiciones, su piloto sí pudo batir a Martín en carrera. La segunda posición la ganó Binder en pista, pero sin embargo el sudafricano sigue “esperando ese último poquito de ayuda” para volver a saborear el triunfo. “Lo volveremos a intentar”, insiste Brad, a pesar de que apela a mejoras para estar al nivel de una montura que se mueve a otro ritmo. Desde el sábado se sucedieron varios récords en Qatar y aunque el último lo marcó un Bagnaia que mejoró en 14 segundos el tiempo de carrera con respecto a las 21 vueltas de 2023, la referencia del sudafricano también hubiera sido superior. Por lo que los de Mattighofen no están tan mal, a pesar de las dudas que siembran sobre la superioridad de Ducati.